Cómo me alegro, mi querido vecino, de que todo te haya salido tan bien: muchas gracias por acordarte de mí ancá Carilla, ya mismo le visitaré.
El Cano, amigo Miguel, es el único de nuestros gloriosos zapateros questá vivo y todavía echa alguna cuatrola donde el Canario; es verdad, a Evaristo lo habíamos omitido; y como dije el otro día también ejerció de buen zapatero Antonio Vaca Bermejo, que tenía la zapatería precisamente al final de tu calle Cilla: en unos cuartos que había frente a la casa ... (ver texto completo)
El Cano, amigo Miguel, es el único de nuestros gloriosos zapateros questá vivo y todavía echa alguna cuatrola donde el Canario; es verdad, a Evaristo lo habíamos omitido; y como dije el otro día también ejerció de buen zapatero Antonio Vaca Bermejo, que tenía la zapatería precisamente al final de tu calle Cilla: en unos cuartos que había frente a la casa ... (ver texto completo)