Sin duda estamos ante la máxima expresión arquitectónica de Acedera. Este monumento megalítico de dimensiones descomunales fue creado hace más de un lustro para calmar la sed de los implacables jugadores de fútbol. Observense sus franjas pintadas hasta en tres tonalidades con connotaciones claramente autónomas. Representa el considerado despilfarro de la burguesía acedereña que poco a poco va dejando de lado las tradiciones cristianas y camina en pos de un laicismo emergente. En los márgenes de este gran monumento se alumbra el llamado "bosque del amor" poblado de una frondosa vegetación claramente orientada a los aromas que ebocan a oriente y en los palacios nazariés como máxima representación.
James Holliday Cynanguaun.
Departamento de Historia Friky.
Profesor de la Universidad de Ohiao.
James Holliday Cynanguaun.
Departamento de Historia Friky.
Profesor de la Universidad de Ohiao.
