En un documento de 1662 se describen las
cuevas de la Polaca, como coves de Serafí o dels pallassos, integradas en el territorio del
Xàtiva Land Art, promovido por el artista Toni Grau Mompó. Se trata de unas cuevas o
grutas de origen natural usadas como
refugio des de la
antigüedad, que se encuentran junto a la
casa tradicidnal y donde situaban los establos. Ocasionalmente también servian de cobijo a los
carros de comediantes que visitaban la ciudad.