PASEOS POR TORRELAMATA
Sin prisa voy recorriendo
las laderas de La Mata,
mi corazón va sintiendo
ese calor que arrebata.
Pinos que están retorcidos
mirando al Mediterráneo,
me parecen reprimidos
entre el personal foráneo.
Playas repletas de vida
entre sueños deliciosos,
La Mata no está perdida
vive momentos gozosos.
Calles tranquilas con flores
en su paisaje salino,
habaneras con amores
hacen sentirte adivino.
Sus viñas están presentes
como testigos del tiempo,
hay sentimientos ausentes
que recuerdan a su templo.
La Mata sigue su marcha
con ambiente alicantino,
y su futuro se ensancha
haciendo bello el camino.
Acercarse a sus salinas
con sus aves voladoras,
luego los sueños afinas
al ser feliz muchas horas.
La Mata tiene su brisa
que en el verano se añora,
allí se vive sin prisa
cuando el paisaje se adora.
Estas tierras levantinas
llenas de dulces recuerdos,
nos parecen más divinas
al vivir momentos cuerdos.
G X Cantalapiedra.
Sin prisa voy recorriendo
las laderas de La Mata,
mi corazón va sintiendo
ese calor que arrebata.
Pinos que están retorcidos
mirando al Mediterráneo,
me parecen reprimidos
entre el personal foráneo.
Playas repletas de vida
entre sueños deliciosos,
La Mata no está perdida
vive momentos gozosos.
Calles tranquilas con flores
en su paisaje salino,
habaneras con amores
hacen sentirte adivino.
Sus viñas están presentes
como testigos del tiempo,
hay sentimientos ausentes
que recuerdan a su templo.
La Mata sigue su marcha
con ambiente alicantino,
y su futuro se ensancha
haciendo bello el camino.
Acercarse a sus salinas
con sus aves voladoras,
luego los sueños afinas
al ser feliz muchas horas.
La Mata tiene su brisa
que en el verano se añora,
allí se vive sin prisa
cuando el paisaje se adora.
Estas tierras levantinas
llenas de dulces recuerdos,
nos parecen más divinas
al vivir momentos cuerdos.
G X Cantalapiedra.
