El templo presenta una nave única con
capillas laterales entre contrafuertes, y una cabecera poligonal. Sus sobrias
torres de la
fachada, aunque aparentemente iguales, no lo son por cuanto la de la derecha posee una original forma de L y data del siglo xiv mientras la opuesta es rectangular y se levantó en 1713. La
portada es una hermosa muestra del barroco, siendo el conjunto escultórico obra de Juan Bautista Borja. Del interior destaca el
altar mayor dorado rococó del siglo xviii, el
coro, en el más puro estilo
gótico del siglo xv, la
capilla de la Inmaculada, del siglo xvi, con una imagen de Esteve Bonet (siglo xviii) el antecoro, poseedor de una portada barroca de
piedra y la capilla del Bautismo cuya
pila en mármol blanco de Carrara es un trabajo italiano del siglo xvi atribuido a la
escuela de Miguel Ángel.