Toño se ve que lo tuyo son las vistas aéreas, desde esa altura y así visto parece una ventana abierta de par en par. Espero que el tiempo no os impida continuar con vuestras tareas en el campo. Saludos.
Buenos días cordovinachos, ¿cómo va la espergura?, yo creo que con este tiempo tan loco e invernal... a este paso se nos va a juntar con el desniete, esperemos que no se hiele mucho.
Todo se hará Toño... vamos a guardar hoy fiesta.
Hola Paco; Como dice Pepe a partir de ahora y hasta Santiago nos encomendamos a San Isidro, nuestro patrón, casi empalmamos las noches con los días en nuestra ardua labor. De momento y descartando algún brote helado en ciertas zonas el desarrollo del viñedo se espera potente debido a la cantidad de humedad que almacena. Habrá que estar muy atentos a la aparición de las enfermedades fúngicas que sin duda aparecerán. El cereal esta hermoso, unos los tratan para la roya etc. y otros lo dejan en plan...
Toñito, viendo esta imagen da impresión de que el tractor va solito. Me hace recordar cuando nos contaban que San Isidro en sus tiempos, cuando llegaba a la pieza, comenzaba a rezar y su par de bueyes le hacían la labor. Pero no creo que estaría también acabada como esta.
Buenos días cordovinachos, ¿cómo va la espergura?, yo creo que con este tiempo tan loco e invernal... a este paso se nos va a juntar con el desniete, esperemos que no se hiele mucho.
Todo se hará Toño... vamos a guardar hoy fiesta.
Hola Paco; Como dice Pepe a partir de ahora y hasta Santiago nos encomendamos a San Isidro, nuestro patrón, casi empalmamos las noches con los días en nuestra ardua labor. De momento y descartando algún brote helado en ciertas zonas el desarrollo del viñedo se espera potente debido a la cantidad de humedad que almacena. Habrá que estar muy atentos a la aparición de las enfermedades fúngicas que sin duda aparecerán. El cereal esta hermoso, unos los tratan para la roya etc. y otros lo dejan en plan...
Toñito, viendo esta imagen da impresión de que el tractor va solito. Me hace recordar cuando nos contaban que San Isidro en sus tiempos, cuando llegaba a la pieza, comenzaba a rezar y su par de bueyes le hacían la labor. Pero no creo que estaría también acabada como esta.