Que maquina, CORDOVIN

¡Cómo no iban a salir los hijos aficionados a la bicicleta!
En pocas casas había bici tan pronto, mas tarde recuerdo como bajabais los hijos mayores la cuesta de la cueva la Virgen a toda pastilla, a veces con los pies en el manillar y detrás Javi, bien en bici o bien corriendo que era un terror.