Todas las edificaciones existentes fueron mimetizadas para evitar su fácil visión desde la
fachada marítima, por lo que su
arquitectura tiende a ocultarse bajo tierra o a imitar las texturas de la
roca para poder ser confundidas con el terreno. A la batería se accede por un
pórtico que imita un
castillo medieval, con cubos almenados, en un estilo que se ha de relacionar con el modernismo y el eclecticismo que tan en boga había estado en las obras civiles de
Cartagena durante la época y años precedentes.