Puente Medieval, SOTO DEL REAL

Puente Medieval.

Construido sobre el arroyo Chozas, une la plaza del pueblo con la iglesia. Tiene un solo ojo con arco ligeramente apuntado, en forma de “lomo de asno”, y está fabricado con mampostería de gran calidad compuesta por piedra granítica local. Aunque no sabemos en qué época se construyó, su morfología es propia de los siglos XII al XV.
Existieron otros puentes antiguos de los que tiene constancia. Se sabe que el duque del Infantado mandó construir uno en el Mediano, por encima del pueblo, en el siglo XV. También desde el siglo XVI existía ya el Puente de los Borrachos, que salva las aguas del arroyo Matarrubias o Alamedilla a la altura del antiguo Camino de las viñas. Este puente todavía existe aunque es de fabricación moderna.

Soto del Real, antigua villa de Chozas, encuentra su origen tras la Reconquista, momento en que fue poblada por pastores segovianos. Sin embargo, de los siglos X y XI se han encontrado ya indicios de la existencia concreta del pueblo, como restos de vivienda y cerámica. La leyenda dice que los pastores de tiempos lejanos construyeron unas chozas en la parte baja de la Sierra de Guadarrama, dentro del actual término de Soto del Real en un lugar llamado “Casas Quemadas”.
Durante el siglo XIII tuvo lugar el famoso litigio sostenido entre los concejos de Madrid y Segovia causado por el dominio de las tierras situadas entre la Villa de Madrid y la sierra, en donde se encontraban, entre otros, Chozas, Colmenar y Porquerizas (Miraflores).
En 1389, el rey Juan I la incorporó al Real de Manzanares, compensando con ello a la familia de los Mendoza por la pérdida de Torija.
El 31 de diciembre de 1568, Felipe II concede a Chozas de la Sierra la exención del Real de Manzanares con todos los atributos y signos de poder, “horca y cuchillo, picota, cárcel y cepo”.
Ya en 1596, Chozas era uno de los puntos fundamentales del camino que unía las villas de Manzanares y Guadalajara.
La denominación actual data de 1959, momento en que se somete a votación popular el cambio del nombre. Las opciones eran tres: Soto del Real, Alameda de la Sierra o mantener el nombre histórico. Los dos nombres de la villa se reflejan en el actual escudo de armas. El primer término del nombre actual, “Soto” hace referencia a los numerosos árboles y sotos que rodean al pueblo, y el segundo “del Real” alude al Real de Manzanares, al que perteneció.