Estas letras las escribo desde Turquía, donde resido ahora. Fui por vez primera a La Cuna invitado, sin saber a donde iba ni lo que me iba a encontrar. He decir que al cabo del tiempo lo he recordado siempre y he vuelto a ir. Para ello tuve que indagar para averiguar como se iba, donde estaba y como e llamaba el restaurante. Desde entonces adquirí la costumbre de quedarme con la tarjeta de los restaurantes que me gustan, asi no pierdo la referencia, dada mi pesima memoria. Aunque dicen que segundas partes nunca fueron buenas... En este caso he decir que mi segunda vez que fui a este restaurante me convencí que la Cuna, en Peralejo, es una magnifica escapada culinaria. Y si vas bien acompañado, de buen seguro, triunfaras. Palabra. Gracias a los que alli trabajais y vivis.