El
letrero de Schweppes luce sobre la
fachada del esbelto
torreón que corona el
edificio Carrión. Para muchos, lleva ahí toda la vida siendo testigo y protagonista del día a día de una ciudad que perdería un poquito de su esencia si en algún momento desapareciera del lugar privilegiado que ocupa en la
Plaza del Callao. Con vistas en primera fila al espectáculo que es la Gran
Vía de
Madrid, el luminoso de Schweppes no se cuestiona, se da por hecho, es uno de los imprescindibles del 'skyline' de la capital.