EL PARDO: EL MONTE DEL PARDO...

EL MONTE DEL PARDO

Encinas llenas de historia
que guardan su compostura,
lugares llenos de gloria
con paisajes de dulzura.

Animales que crecieron
en libertad vigilada,
ellos quizá no entendieron
lo que es la vida acotada.

Monte que pierdes de vista
por sus grandes dimensiones,
con pasado imperialista
y sus grandes sensaciones.

Caminar entre sus pinos
es una pura gozada,
vives momentos divinos
en cualquier tarde encantada.

El Manzanares suspira
al ver sus aguas cercadas,
en su brisa cuando gira
se notan tardes heladas.

El Pardo como testigo
de laderas y barrancos,
que nadie lo ve castigo
por no vivir entre atascos.

Monte lleno de belleza
que se pierde en la distancia,
animales con nobleza
que derrochan arrogancia.

Esos caminos perdidos
que se pierden entre rejas,
no suelen ser permitidos
ni aceptan normas ni quejas.

Brilla el pantano a lo lejos
con sus aguas bien cuidadas,
viendo que lanza reflejos
en las tardes anheladas.
G X Cantalapiedra.