Municipio situado al norte de Madrid, sobre un terreno muy abrupto, en la falda del Cerro de la Mujer Muerta, también llamada Peña de Cabra, en el macizo del Ayllón, conocida como el Balcón de la Sierra Norte, por la maravillosa panorámica que ofrecen sus 1.096 m. de altitud.
Su termino municipal se extiende desde las faldas de la Sierra de la Mujer Muerta y el Valle del Riato hasta el Embalse del Villar, una de las presas más antiguas de la Comunidad de Madrid.
Existen varias versiones sobre el origen de su nombre. La primera de ellas lo relaciona con "berza", "verde", derivado del latino verdía, por la vegetación frondosa que cubría su territorio. La segunda, probablemente más acertada, deriva de berezosa, berezo, sincopado de "brezo", termino usual en las comarcas de la Jara y de los Montes de Toledo, en clara alusión al matorral de brezo que convive con la jara y del que se hacía un buen carbón en la zona. La ultima acepción deriva del prefijo celta bertí, belo, "que esta trenzado", "cesta", "cesto".
Berzosa está bañada por el río Lozoya, el río Riato y el arroyo del Barranco de la Hiena. El embalse de El Villar se asienta en parte del término municipal de Berzosa y es uno de los primeros que se construyeron en la zona para abastecer de agua a Madrid.

Ayuntamiento: Pza. de la Constitución, 1 - Tel.: 91 868 70 31 - 63

- Iglesia Parroquial de la Asunción de Nuestra Señora. Data del siglo XVII y sufrió graves daños en la Guerra Civil siendo prácticamente reconstruida. Posee una única nave rectangular, separada del presbiterio por un arco triunfal de medio punto, con arquivoltas y alfiz. Presenta un coro alto a los pies, con barandilla de balaustres torneados en madera, y el ingreso se realiza por la portada de la fachada sur, la cual presenta jambas y dintel de granito, y ménsulas barrocas.
En el exterior, los muros son de mampostería, enclavados en algunos sectores, y la espadaña, de dos cuerpos y realizada en ladrillo, se remata con una cruz de granito.

- Carnaval. Además de los disfraces que llevan los habitantes, también se viste a la vaquilla.

- El 15 de agosto, las fiestas patronales en honor de la Asunción de Nuestra Señora. Se conmemora con misa, procesión y subasta de varas. También hay conciertos, baile, juegos infantiles y tradicionales y encuentros gastronómicos.

Muchas de sus celebraciones tienen origen en ritos ligados a la naturaleza y las formas de vida. Así, la matanza, en invierno, o la Fiesta de los Mayos que recuerda la bendición de los campos para implorar una buena cosecha.

Se desconoce el origen del primer asentamiento en el municipio. De su historia medieval se sabe que perteneció desde el siglo XIV al señorío de Buitrago, como una de las 32 aldeas y villas que lo componían, administradas por los Mendoza. Es en estas fechas, concretamente hacia los años 1330-1350, cuando se tiene el primer testimonio escrito de la existencia de Berzosa en el Libro de la Montería de Alfonso XI, como lugares de caza de la corte.
Esta situación, propia del feudalismo medieval, perdurará sin excesivos cambios hasta el siglo XIX.
La localidad era aún muy pequeña a finales del siglo XVII. El censo de 1670 registra únicamente 18 vecinos. El catastro de Ensenada registra en 1751 una población de 30 vecinos distribuidos en 35 casas, ninguna de las cuales era inhabitable ni arrendada. La mayor parte de sus habitantes eran agricultores-ganaderos, aunque también existían otras profesiones: un escribano, un tabernero (oficio en el que se turnaban los vecinos), un cirujano y un herrero. No había jornaleros, ya que todos los trabajadores se ocupaban de sus propiedades comunalmente y solo encontramos una mujer "pobre de solemnidad".
En cuanto a la organización territorial, todo el partido de Buitrago, y con él Berzosa, pertenecía a la Casa de los Duques del Infantado. El señorío de Buitrago, tras la creación de las intendencias o provincias durante el reinado de Fernando VI en 1479 estaba incluido en la de Guadalajara, recayendo la administración de justicia en la figura del corregidor.
Con el comienzo del siglo XIX, se van a dar una serie de acontecimientos que modificarán sustancialmente el panorama socio-económico de Berzosa, como son la crisis en la cabaña ovina, la ausencia de vías férreas o las desamortizaciones eclesiástica y civil entre otros.

El Conjunto urbano se asienta a media ladera, en un entorno frondoso y de gran riqueza paisajística en el que conviven bosques de quejigos, robles, chopos, fresnos y sauces junto a zonas de pinar y olmedas. Entre la fauna del municipio destacan el águila real o el buitre leonado, así como mamíferos característicos de la fauna ibérica: jabalíes, zorros, liebres, corzos etc.
El núcleo de población se distribuye en manzanas irregulares y una calle principal que atraviesa el municipio, el camino de Serrada. Se conservan ejemplos de arquitectura tradicional, casas que incluyen vivienda y corral.
La plaza del pueblo es un ensanchamiento donde se localizan el Ayuntamiento y la Iglesia parroquial. El contorno exterior se rodea de prados alternando con huertos, no existiendo construcciones reseñables en el resto del territorio, salvo el lavadero y un potro utilizado para herrar vacas y caballerías, vestigio de su pasado ganadero. Esta instalación, hecha de bloques de piedra y tirantes de hierro, permitía inmovilizar a los animales para poner herraduras en sus cascos o para practicarles determinadas curas.
A cuatro kilómetros de la localidad, el pinar de Casasola cuenta con un fantástico entorno; un refugio de montaña ofrece alojamiento a los excursionistas. El Pico de Picozo es uno de los hitos naturales del municipio. Sus 1.392 metros ofrecen extraordinarios panoramas de los montes, valles y bosques de la zona. Desde aquí se puede hacer parapente.