Quisiera que mi comunicado fuera escuchado por alguien y es que un montón de desaprensivos están deteriorando lo que es la parte trasera del edificio de la Casa de Cultura del Distrito VIII. La policía local se ha presentado imnumerables veces y durante un par de días todo vuelve a la normalidad. Para colmo de males algunos vecinos han solicitado que el edificio sea demolido y convertirlo en aparcamientos. Yo no culpo a las autoridades, pero si pido mano dura para los gamberros que campan a sus anchas bebiendo botellones dejando rotos los cascos y llenando la calle de cristales, se orinan y dejan un tremendo mal olor. Por favor, pido ayuda para que las actividades se sigan ejerciendo de una forma lógica, no esperando que un balonazo rompa la armonía al pegar en la puerta metálica o en las ventanas. Doy las gracias de antemano a quien se digne escucharme.