Si no sabes cuidar un becerro, ¿cómo vamos a querer estar en tus herraduras?.Debe ser el único inteligente del rebaño, incluido el pastor, y seguro que se ha fijado en tus piernas arqueadas, en la línea recta de tus cejas y el pestazo a calostro que ha pensado, sí hombre, eso que hacemos algunos y que tú no pillas, más vale acurrucarme en los brazos de San Antón que soportar al bípedo este.La naturaleza es sabia siempre.Te cambio el ternero por una enciclopedia.No es una marca de tractor ni se pone ... (ver texto completo)