El patio del colegio público Garigot, CASTELLDEFELS

En el silencio de esta tarde de domingo se echa de menos el alborotado griterío del alumnado, sus esforzadas pero divertidas actividades deportivas en tableros y porterías, sus amistosas persecuciones y hasta el intercambio de bocadillos. Pero mañana, lunes, el recreo nos devolverá la maravilla de la infancia formándose, compartiendo... y creciendo.
(2012)