EN DEFENSA DE AGAPITO MODROñO.-
Avegonzada ha regresado del pueblo, donde el fin de semana pasado he leído los anónimos contra Agapito Modroño.
Cuando yo niña, le recuerdo con su vespa venir a dar clase gratis a los del bachillerato radiofónico. Era un muchacho guapo, simpático, deportista, alegre, de los de Acción Católica.
Creo ha sido y es persona muy consecuente con sus ideas. Eso en un pueblo corrompido y acobardado, no se perdona. Si no hubiera sido por él, en las pasadas elecciones, sólo hubiera habido una candidatura, la del Partido único. No se conoce otro caso igual de instalación en el chupe con malas artes, de aniquilación de los adversarios.
Hay que tenerlos cuadrados para tomar el relevo de los aplastados y, cual gladiador solitario, enfrentarse, con la verdad, su honradez, su valentia e inteligencia, contra los poderes fácticos locales, Trono y Altar, apoyados por los provinciales en la provincia del "Caso Zamora".
Del cobarde anónimo, todo mentiras y difamación, lo que más me ha dolido es que digan que para vender muchos libros, en el que ha sacado sobre la Guerra Civil, nombra a mucha gente, aunque sólo sea para decir "chorradas de Perogrullo". ¡Qué sabrán esos ignorantes!. ¿Lo han leído?. Es un libro documentado, objetivo, conciliador, ámeno sin perder el rigor histórico. LES ASEGURO NO ES NINGUNA CHORRADA CONTAR LO QUE HICIERON CON MI ABUELO. Estos autores de ahora son herederos de aquellos "autores". Tienen la misma pinta. No han visto como el relato "El Jornalero", que intercala, es un canto a la concordía, una preciosicad que ganó un premito literario. ¡Desde cuando los ignorantes se convierten en críticos literarios?.
¡Cuánto disfrutamos los emigrantes con sus libros!. ¡Cómo recuerda nuestras cosas!. ¡Son un pura gozada y no el rollo de las ermitas y cofradías!. Por eso él vende y no Pablo, "El Ermitas". éste mejor que nos explicara qué pasó en la construcción de los pisos del Cole, siendo él Aparejador.
¡ánimo Agapito!. Ya sé tu sistema nervioso no está para muchos trotes. No me estraña viviendo entre esa calaña, pero tienes a Sarita, fue mi catequista y al imaginarme a los ángeles rubios pensaba en ella. Sé que ha sido un ángel para ti toda la vida y que tenéis cinco hijos estupendos. ¡Qué mala es la envidia en el pueblo!, ¡qué viles y ruines los de los anónimos!. Para darte ánimo te digo los emigrantes estamos contigo y, plagiando a mi Miguel Hernández te digo: "no te derrumbes/ haz frente a lo que pasa / y a lo que ocurre".
PAQUITA.
Avegonzada ha regresado del pueblo, donde el fin de semana pasado he leído los anónimos contra Agapito Modroño.
Cuando yo niña, le recuerdo con su vespa venir a dar clase gratis a los del bachillerato radiofónico. Era un muchacho guapo, simpático, deportista, alegre, de los de Acción Católica.
Creo ha sido y es persona muy consecuente con sus ideas. Eso en un pueblo corrompido y acobardado, no se perdona. Si no hubiera sido por él, en las pasadas elecciones, sólo hubiera habido una candidatura, la del Partido único. No se conoce otro caso igual de instalación en el chupe con malas artes, de aniquilación de los adversarios.
Hay que tenerlos cuadrados para tomar el relevo de los aplastados y, cual gladiador solitario, enfrentarse, con la verdad, su honradez, su valentia e inteligencia, contra los poderes fácticos locales, Trono y Altar, apoyados por los provinciales en la provincia del "Caso Zamora".
Del cobarde anónimo, todo mentiras y difamación, lo que más me ha dolido es que digan que para vender muchos libros, en el que ha sacado sobre la Guerra Civil, nombra a mucha gente, aunque sólo sea para decir "chorradas de Perogrullo". ¡Qué sabrán esos ignorantes!. ¿Lo han leído?. Es un libro documentado, objetivo, conciliador, ámeno sin perder el rigor histórico. LES ASEGURO NO ES NINGUNA CHORRADA CONTAR LO QUE HICIERON CON MI ABUELO. Estos autores de ahora son herederos de aquellos "autores". Tienen la misma pinta. No han visto como el relato "El Jornalero", que intercala, es un canto a la concordía, una preciosicad que ganó un premito literario. ¡Desde cuando los ignorantes se convierten en críticos literarios?.
¡Cuánto disfrutamos los emigrantes con sus libros!. ¡Cómo recuerda nuestras cosas!. ¡Son un pura gozada y no el rollo de las ermitas y cofradías!. Por eso él vende y no Pablo, "El Ermitas". éste mejor que nos explicara qué pasó en la construcción de los pisos del Cole, siendo él Aparejador.
¡ánimo Agapito!. Ya sé tu sistema nervioso no está para muchos trotes. No me estraña viviendo entre esa calaña, pero tienes a Sarita, fue mi catequista y al imaginarme a los ángeles rubios pensaba en ella. Sé que ha sido un ángel para ti toda la vida y que tenéis cinco hijos estupendos. ¡Qué mala es la envidia en el pueblo!, ¡qué viles y ruines los de los anónimos!. Para darte ánimo te digo los emigrantes estamos contigo y, plagiando a mi Miguel Hernández te digo: "no te derrumbes/ haz frente a lo que pasa / y a lo que ocurre".
PAQUITA.