VILLALPANDO: Hoy, último día del año, me ha sacudido un ramalazo...

Hoy, último día del año, me ha sacudido un ramalazo de nostalgia al comprobar que por primera vez en toda mi vida, no voy a pasar ni un solo día de la Navidad en Villalpando (excepto el rato que el día 26 empleé en llevar un ramo de flores a mi querida madre desaparecida hace unos meses).
Y lo peor de todo es que no sé los motivos.
¿Tendré miedo de constatar que a las 8 de la tarde no hay ni un alma por las calles de mi pueblo?.
¿Qué no hay ni un solo niño jugando en la Plaza Mayor?.
¿Qué en los bares, tomando vinos (o un café), estamos los de siempre?.
¿Qué en el ambiente únicamente se respira tristeza y resignación?.
Yo entiendo que esto no puede seguir así. QUE NO PODEMOS RESIGNARNOS A QUE TODO SE DERRUMBE SIN, POR LO MENOS, INTENTAR IMPEDIRLO.
Deberíamos crear (al margen de los partidos políticos y como han hecho en multitud de localidades) una PLATAFORMA CIVICA, que estudie, programe y presente soluciones (o los encargue a los correspondientes expertos) REVINDICANDO A QUIEN CORRESPONDA, soluciones, inversiones y sobre todo BUENA CONVIVENCIA.
Debería estar dirigida por personas independientes, emprendedoras (jóvenes y maduras) y que, perteneciendo a la mayoría de los gremios u oficios, RESIDAN en Villalpando. Los que estamos fuera, además de apoyo presencial en las reuniones que se convoquen (e incluso económico como es imprescindible para crear y consolidar cualquier asociación). Aparte arrimaríamos nuestros conocimientos y posibilidades en los distintos organismos (hay varios villalpandinos en puestos importantes).
¿Porqué no intentarlo?. Mientras tanto os deseo a todos un feliz 2006 (puede ser un buen año para además de dejar de fumar, iniciemos el repunte de nuestro pueblo). Pablo Román Allende.