Que bonito es escribir en INTERNET o en cualquier otro medio. Siempre se pueden seguir huellas perdidas y te reencuentras con familias, amigos o ex compañeros de clase, a los que has tenido una alta estima. Mi caso es que, Lorenzo Mozo, tuvo la cortesía de contestar un mensaje y me dio la pista de donde vivían. Inmediatamente, puse mi maquinaria informativa para hallar los teléfonos de los MOZO y un tío de José Antonio, mi ahijado, se alegró mucho del interés mostrado, a la vez que se recordaba de ... (ver texto completo)