Considero un gran acierto el que se haya abierto de nuevo el
bar CHARRO, por un matrimonio de Cuelgamueres.
Ofrecen gran variedad de pinchos y lo abren a las 8 de la mañana, lo que permite a los viajeros que tienen que utilizar los autobuses de línea, que puedan tomar un café antes de coger el autocar.
Daba gusto estos días de atrás ver los tres
bares del
pueblo llenos de gente.