PARA EL OCHO DE SEPTIEMBRE. Si algo distingue a VILLAFRECHOS es su arraigada confianza en la Patrona VIRGEN DE CABO. Su Ermita, a la entrada del pueblo, desde Rioseco, es la Atalaya desde donde contempla la Virgen Patrona a su pueblo. Desde ese lugar escucha los ruegos de sus vecinos en aquellos momentos en que su ayuda es intercedida para mitigar los ardores de la vida. En ese lugar recibe las honras de su pueblo, en especial el OCHO DE SEPTIEMBRE, cima de los Ruegos, Respetos, y Veneraciones contenidas en la Novena celebrada a sus pies. El OCHO DE SEPTIEMBRE, el pueblo en Peregrinación, entre otros actos, pasea, como en la foto, a su Patrona por la Pradera de la Ermita. De forma virtual oigo a Jorge Cafrune, de la Pampa Agentina, cantar algunas estrofas entresacas de la letra diridas a la Advocación de la Virgen India, sea bajo esa Advocación o de la VIRGEN DE CABO, ES LA MISMA:
Virgen Milagrosa, te elevo mi cantar,
Son todos peregrinos, Señora del lugar.
Así somo esclavos de tu bondad divina,
Así somos esclavos de tu infinito amor.
Virgen mía,
Mereces el respeto y la veneración,
Por eso yo te elevo mis plegarias,
Mereces el respeto y la Veneración,
Y PIDO QUE ESCUCHES MI RUEGO POR FAVOR.
Virgen Milagrosa, te elevo mi cantar,
Son todos peregrinos, Señora del lugar.
Así somo esclavos de tu bondad divina,
Así somos esclavos de tu infinito amor.
Virgen mía,
Mereces el respeto y la veneración,
Por eso yo te elevo mis plegarias,
Mereces el respeto y la Veneración,
Y PIDO QUE ESCUCHES MI RUEGO POR FAVOR.
