MIGUEL DELIBES 100, AÑOS DE SU NACIMIENTO EN VALLADOLID.
NACIÓ EL 17, DE OCTUBRE DE 1920. FALLECIÓ, EL 12 DE MARZO DEL 2010.
Los Caminos de Castilla dicen que tienen recuerdos, de mucha gente sencilla que fueron hombres muy cuerdos. Miguel Delibes profeta de la tierra castellana, con mucha escritura inquieta a la vez de ser humana. Valladolid de leyendas con su vida por delante, donde pisó mucha sendas de cazador elegante. Páramos con sus llanuras, conversaciones privadas, conociendo las diabluras de costumbres castellanas. El Pisuerga marcha erguido en cualquier bella mañana, y jamás se ve vencido sin ver su corriente vana. Miguel pisando Castilla, que su “Hereje” lo reclama, hablando de alguna villa mantiene firme su llama. Cien años tiene su historia, Valladolid le da fama, su cultura es la memoria que a mucha gente da calma. Castellano con razones de vivir en la esperanza, en sus grandes emociones tuvo que tener templanza, Miguel Delibes se siente, libros que tocan el alma, dicen que siempre presiente el dar a Castilla calma. Han de pasar muchos siglos, serán grandes sus andanzas, entre signos de sigilo Miguel nos dejó templanzas. Cabalgando por Castilla, era su ferviente llama, hizo ver la maravilla que su corazón aclama. Su memoria sigue activa, era grande su mirada, el conocerle motiva al ver Castilla encantada. Nombres de libros presentes que se recuerdan con ganas, parecen no estar ausentes en las tierras castellanas. Cien años se van pasando, su memoria es recordada, quizá se marchó pensando en alguna cabalgada. Valladolid fue su cuna, y su ciudad siempre amada, conocerle fue fortuna al ser su ruta anhelada. Las sombras de los cipreses siempre serán alargadas, hoy son otros intereses sus obras tan admiradas. Caminos que van al Duero, carros yugos y besanas, algún bonito te quiero sobre tierras castellanas. G X Cantalapiedra. 17 - 10 – 2020.
NACIÓ EL 17, DE OCTUBRE DE 1920. FALLECIÓ, EL 12 DE MARZO DEL 2010.
Los Caminos de Castilla dicen que tienen recuerdos, de mucha gente sencilla que fueron hombres muy cuerdos. Miguel Delibes profeta de la tierra castellana, con mucha escritura inquieta a la vez de ser humana. Valladolid de leyendas con su vida por delante, donde pisó mucha sendas de cazador elegante. Páramos con sus llanuras, conversaciones privadas, conociendo las diabluras de costumbres castellanas. El Pisuerga marcha erguido en cualquier bella mañana, y jamás se ve vencido sin ver su corriente vana. Miguel pisando Castilla, que su “Hereje” lo reclama, hablando de alguna villa mantiene firme su llama. Cien años tiene su historia, Valladolid le da fama, su cultura es la memoria que a mucha gente da calma. Castellano con razones de vivir en la esperanza, en sus grandes emociones tuvo que tener templanza, Miguel Delibes se siente, libros que tocan el alma, dicen que siempre presiente el dar a Castilla calma. Han de pasar muchos siglos, serán grandes sus andanzas, entre signos de sigilo Miguel nos dejó templanzas. Cabalgando por Castilla, era su ferviente llama, hizo ver la maravilla que su corazón aclama. Su memoria sigue activa, era grande su mirada, el conocerle motiva al ver Castilla encantada. Nombres de libros presentes que se recuerdan con ganas, parecen no estar ausentes en las tierras castellanas. Cien años se van pasando, su memoria es recordada, quizá se marchó pensando en alguna cabalgada. Valladolid fue su cuna, y su ciudad siempre amada, conocerle fue fortuna al ser su ruta anhelada. Las sombras de los cipreses siempre serán alargadas, hoy son otros intereses sus obras tan admiradas. Caminos que van al Duero, carros yugos y besanas, algún bonito te quiero sobre tierras castellanas. G X Cantalapiedra. 17 - 10 – 2020.