Si mira escuchar, escuchar hay que escuchar a todo el mundo, incluso se puede escuchar ladrar a los perros y rebuznar a los burros, pero las decisiones las toma el Alcalde y es el Ayuntamiento el que gobierna el municipio. Es ridículo que el Alcalde tenga que hacer lo que quiera hacer la oposición, que por cierto es NADA. La oposición lo que quiere es “NO HACER”, NO HACER Centro Cívico, NO HACER márgenes de arroyos, NO GASTAR porque al fin de al cabo Moral acabara en pedanía de Rioseco (dicho textualmente por el representante de la oposición). Pero claro el pueblo pasa a manos de Rioseco pero las fincas siguen en manos de sus propietarios. Ese es el meollo de la cuestión que a algunos les interesa: que Moral sea sólo y simplemente el lugar donde guardan sus tractores y tienen sus fincas. Lo que es indignante es que a este carro se suba gente que en Moral tiene algo más que intereses agrícolas y que estén comandados por gente que lo único que le interesa es tener su despacho para controlar sus intereses sin importarle para nada los del resto de agricultores y ganaderos que también viven dignamente del campo y se ven así manipulados.