El artesano zapatero Julio Vibot recibe un entrañable homenaje como Persona Mayor del 2008
El espectáculo de magia de Carlos Cerrate cerró ayer la Semana de los Mayores. La desapacible tarde de invierno redujo la asistencia de público al teatro Principal, pero el homenaje a Julio Vibot fue cálido como de verano. Además, la magia impregnó todo el ambiente en el teatro porque la llevaba él en sus manos. Es una persona sosegada, tranquila, que va cumpliendo años callandito, pero con magia en sus manos. Así se refirió a él la concejala de Mayores, Aurora Merchán, quien le dedicó un poema con el título de 'Magia en las manos' para hablar de dos siglos de artesanía en el calzado, un oficio que inició su familia en la localidad vallisoletana de Cuenca de Campos pero que trasladó con toda su maestría a la capital palentina, a la calle Barrio y Mier, donde Julio Vibot ejerció hasta que se jubiló hace diez años.
Su vida fue recordada ayer por quienes le acompañaban en el teatro Principal, muchos familiares y compañeros de la residencia San Bernabé, donde actualmente reside. El homenajeado se mostró muy orgulloso por recibir la distinción «porque a Palencia la llevo siempre dentro de mi corazón».
Tanto las concejalas de Mayores y de Bienestar Social, Aurora Merchán y Marisa Martín, respectivamente, como el propio alcalde, Heliodoro Gallego, ensalzaron toda esa vida dedicada al calzado a la medida y ortopédico, siempre realizado con la máxima de que la artesanía se haga arte y servicio. Países como Italia, Alemania, Bélgica, Holanda, Polonia, Rusia o Estados Unidos han conocido a través de exposiciones la colección de zapatos de Julio Vibot, que ahora se exhibe en el Museo Nacional del Calzado de Elda (Alicante), quizá más lejos de lo que al propio artesano zapatero le gustaría pero en un lugar muy adecuado con una sala que lleva su nombre y de forma que contribuye también a exportar el nombre de Palencia.
Ha conseguido varios premios nacionales y también que personalidades como la Infanta Elena, el Papa Juan Pablo II o Teresa de Calcuta los vistieran en alguna ocasión. Su único sueño pendiente es recopilar toda su investigación en un libro que viniera a completar toda la trayectoria laboral y vital de Julio Vibot.
Sacada del Norte de Castilla. Edición Palencia del 29 de noviembre de 2008
El espectáculo de magia de Carlos Cerrate cerró ayer la Semana de los Mayores. La desapacible tarde de invierno redujo la asistencia de público al teatro Principal, pero el homenaje a Julio Vibot fue cálido como de verano. Además, la magia impregnó todo el ambiente en el teatro porque la llevaba él en sus manos. Es una persona sosegada, tranquila, que va cumpliendo años callandito, pero con magia en sus manos. Así se refirió a él la concejala de Mayores, Aurora Merchán, quien le dedicó un poema con el título de 'Magia en las manos' para hablar de dos siglos de artesanía en el calzado, un oficio que inició su familia en la localidad vallisoletana de Cuenca de Campos pero que trasladó con toda su maestría a la capital palentina, a la calle Barrio y Mier, donde Julio Vibot ejerció hasta que se jubiló hace diez años.
Su vida fue recordada ayer por quienes le acompañaban en el teatro Principal, muchos familiares y compañeros de la residencia San Bernabé, donde actualmente reside. El homenajeado se mostró muy orgulloso por recibir la distinción «porque a Palencia la llevo siempre dentro de mi corazón».
Tanto las concejalas de Mayores y de Bienestar Social, Aurora Merchán y Marisa Martín, respectivamente, como el propio alcalde, Heliodoro Gallego, ensalzaron toda esa vida dedicada al calzado a la medida y ortopédico, siempre realizado con la máxima de que la artesanía se haga arte y servicio. Países como Italia, Alemania, Bélgica, Holanda, Polonia, Rusia o Estados Unidos han conocido a través de exposiciones la colección de zapatos de Julio Vibot, que ahora se exhibe en el Museo Nacional del Calzado de Elda (Alicante), quizá más lejos de lo que al propio artesano zapatero le gustaría pero en un lugar muy adecuado con una sala que lleva su nombre y de forma que contribuye también a exportar el nombre de Palencia.
Ha conseguido varios premios nacionales y también que personalidades como la Infanta Elena, el Papa Juan Pablo II o Teresa de Calcuta los vistieran en alguna ocasión. Su único sueño pendiente es recopilar toda su investigación en un libro que viniera a completar toda la trayectoria laboral y vital de Julio Vibot.
Sacada del Norte de Castilla. Edición Palencia del 29 de noviembre de 2008
