Que decepción. Despues de siete meses todo lo que parecia distintos vuelbe a ser igual que antes. Pueden cambiar los que lo usan pero el collar es el mismo, intacto sin un solo agujero nuevo. nada a cambiado aunque pueda parecer todo distinto. Se mantiene el egoismo, los intereses particulares y esa costumbre para fastidiar al prójimo. Quieren que se vayan los que estan y para ello no importa amargarles la vida. Se denuncia cualquier cosa sea justa o no con el único fin de hacer daño de forma gratuita. ... (ver texto completo)