POR TIERRAS CASTELLANAS
También en Galapagares el silencio se amontona,
es de los bellos lugares donde su gente razona.
Poblados que están desiertos en la estepa castellana,
habitantes sin alientos que sufren cada mañana.
Las promesas quedan rotas y otras veces están vanas,
hoy parecen ser derrotas de gentes que llevan canas.
Caminan con paso lento temiendo a la madrugada,
y saben del sufrimiento de una tierra abandonada.
Los recuerdos siguen vivos en esta tierra adorada,
no saben los adjetivos que da una finca labrada.
Poblados que están desiertos y que apenas tienen casas,
sus ojos tienen abiertos defendiendo bien sus causas.
Poblados de mi Castilla, de esa Castilla que clama,
donde su gente sencilla empieza a sufrir su alma.
La voz de la tierra tira y es una voz desgarrada,
en su agonía suspira por verse poco ayudada.
Me duele ver esta imagen de casi nada esperanza,
es tan triste este paisaje que ya no existe templanza.
Calles sin ningún vecino, desiertas están las plazas,
no debe ser tan divino el pasar por estas bazas.
Poblados sin niños dentro, ni esperanza en el mañana,
allí no existe hoy un centro aunque su vida sea sana.
Puede que cambie la vida en estos bellos parajes,
más hoy son ruta escondida sin sueños en sus paisajes.
G X Cantalapiedra.
También en Galapagares el silencio se amontona,
es de los bellos lugares donde su gente razona.
Poblados que están desiertos en la estepa castellana,
habitantes sin alientos que sufren cada mañana.
Las promesas quedan rotas y otras veces están vanas,
hoy parecen ser derrotas de gentes que llevan canas.
Caminan con paso lento temiendo a la madrugada,
y saben del sufrimiento de una tierra abandonada.
Los recuerdos siguen vivos en esta tierra adorada,
no saben los adjetivos que da una finca labrada.
Poblados que están desiertos y que apenas tienen casas,
sus ojos tienen abiertos defendiendo bien sus causas.
Poblados de mi Castilla, de esa Castilla que clama,
donde su gente sencilla empieza a sufrir su alma.
La voz de la tierra tira y es una voz desgarrada,
en su agonía suspira por verse poco ayudada.
Me duele ver esta imagen de casi nada esperanza,
es tan triste este paisaje que ya no existe templanza.
Calles sin ningún vecino, desiertas están las plazas,
no debe ser tan divino el pasar por estas bazas.
Poblados sin niños dentro, ni esperanza en el mañana,
allí no existe hoy un centro aunque su vida sea sana.
Puede que cambie la vida en estos bellos parajes,
más hoy son ruta escondida sin sueños en sus paisajes.
G X Cantalapiedra.