BLACOS: Vaya por delante que huyo de la polémica como el gato...

Quiero dejar claro que me agota la sensación de perseguir sombras y que no hay nada más lejos de mi intención que sentar cátedra con lo que escribo, o que parezca que es un dogma de fe irrebatible, algo así como la verdad absoluta. Dicho esto me pregunto, ¿Blacos?, ¿Qué es Blacos? Sería muy fácil decir que hay tantas respuestas como personas estén dispuestas a responder. Podemos empezar por lo fácil. Blacos es un lugar físico, un punto geográfico que tiene como referencia el nombre de un pequeño pueblo de la Soria profunda. Visto así no tendría más recorrido, por lo tanto ésta no puede ser la definición que nos interesa, porque en realidad ni contiene ni dice nada de interés. Afortunadamente tiene otra cara y otras muchas explicaciones. Pero yo me voy a quedar con una. Blacos es un sentimiento, un sentimiento que está por encima de partidas de nacimiento, títulos de propiedad, censos de empadronamiento, cédulas vecinales o carnets de identidad. En Blacos sólo nacen los que nacen allí. Y es muy importante para los que hemos tenido la suerte de nacer allí, pero es una fortuna muy personal que tienen mucho de coincidente y poco más. Pero que Blacos es un sentimiento se refleja mejor asi: cada uno lo vive de una manera personal, propia e intransferible, y lo que es más importante, ese sentimiento sobre Blacos lo puede expresar y vivir con tanta o más intensidad una persona que va a Blacos que otra que ha nacido y vive allí. Por eso los sentimientos son personales, pero es que además cada uno es muy libre de vivir ese sentimiento hacia Blacos de la mejor manera que le parezca, faltaría más. O alguien piensa que quiere más a Blacos una persona que ha nacido y/o vive allí u otra a la que la necesidad le ha obligado a abandonar sus raíces, buscarse la vida lejos de casa y de la familia y morirse de nostalgia en esas tardes de agosto urbano o en esas tristes noches de Navidad en las que la vida lo separa de lo que más quiere o de lo que más echa de menos. O quizás alguien puede pensar que ese sentimiento es más pequeño entre los hijos y nietos de esas personas. O incluso que es más pequeño entre la familia y los amigos de "los de Blacos", esos que un día fueron al pueblo y sus gentes y sus calles se les clavaron en el corazón, les dejó una marca indeleble y les provocó una deuda pendiente con el pueblo. ¿Podemos dar ejemplo de cariño a esas generaciones de jóvenes que con todo el mundo a su alcance, hambrientos de aventuras y deseos de viajar, se reservan unos días para ir a " su pueblo", y disfrutar de sus fiestas y de sus amigos y de sus menos amigos?. Y hablando de fiestas, ¿Alguien piensa que podríamos mantener las fiestas que tenemos si no fuera porque colaboran todos los que tienen un sentimiento por Blacos, hayan nacido donde hayan nacido vengan de donde vengan y vayan a donde quiera que vayan?, ¿Alguien se ha parado a pensar que sería de Blacos dentro de 10,15, o 20 años si estos jóvenes durante todo ese tiempo no mantienen vivo su sentimiento por el pueblo? No hace falta responder a ninguna de estas preguntas, pero sí me voy a permitir hacer una reflexión. Blacos somos todos estos, Blacos es la suma de muchas voluntades, de muchos esfuerzos, de mucha dedicación y de mucho, mucho cariño. Todos ellos, de uno en uno o untos, son capaces de contrarestar a los que prefieren no sumar y dedicarse a cualquier otra operación aritmética. Blacos es un espacio físico abierto, pero es sobre todo un rincón de momentos vividos y de otros por vivir, de experiencias disfrutadas, de dolores perpetuos, y de nostalgia. Una nostalgia entendida como esa felicidad infantil que se acaba idealizando para siempre. U ahí en cualquiera de los huecos de ese rincón nos refugiamos todos los que compartimos ese sentimiento. Y esta forma de refugiarse en ese rincón es tan diversa como las personaes que habitamos ese refugio. Están los que prefieren oír, hay otros que prefieren ver y callar y hay otros, los menos, que preferimos exteriorizar ese sentimiento. Y uno de los lugares en los que lo hacemos, en forma de anécdotas, historias, chascarrillos, cotilleos,,, es en esta página. Una página que tiene el nombre perfecto, el más adecuado. BLACOS, con mayúsuculas. Y digo que es perfecto porque por encima de lo que se escriba, hay debajo un sentimiento unánime. El del amor a Blacos, pero sobre todo el del amor a las gentes de Blacos o que pasan por Blacos. Y puestos a elegir siempre será mejor mantener un sentimiento que un nombre. Quizás una visión más profunda le permitiría a alguno descubrir cosas muy interesantes. Gracias a esta página se han recuperado amistades, se han concertado encuentros y citas gastronómidcas, se ha encontrado un punto en común para entablar una conversación o discutir de algunas de las afirmaciones o críticas que en ella se han hecho. Ha permitido conocerse a generaciones separadas por el espacio y por el tiempo. Y a través de esta página nos hemos dado cuenta de que las distancias sólo existían en la imaginación, o en la timidez, o en la pereza.... Y para ello no ha sido necesario hablar sólo de la siega a hoz, de las paredes de adobe, de los pajares y cuadras o de la cadena de alimentación de la población sedentaria de Blacos, por ejemplo.
Todas estas situaciones y todas estas experiencias puede parecer que dan como para escribir un libro, y probablemente sea así, pero la traducción real es que hay muy pocos dispuestos a expresar públicamente sus sentimiento sobre Blacos, y me imagino que nadie discutirá que tienen todo el derecho del mundo a su privacidad. Y luego hay otros pocos, muy pocos, que sí quieren hacerlo públicamente, seguro que para compartirlo y disfrutarlo con otras personas, y han encontrado en esta página un lugar para hacerlo. Y tienen todo el derecho a hacerlo de la forma que quieran y hablando de los temas que les parezcan más oportuno, creo yo vamos. Cuando hace muchos años me encontré con esta página estaba completamente vacía y sentí una envidia sana de la de Torreblacos que estaba llena de fotografías y de algunos mensajes. Ahora la página de Blacos rebosa salud y energía. Está sana y por lo tanto recetarle cualquier medicamento es contraproducente, y además puede tener el contagio como efecto secundario,. Y la página está sana y vigorosa porque es el reflejo de todos los que quieren publicar sus fotos. En el tema de los mensajes sufre algunos achaques y algunas veces se queda sin oxígeno. Cuando sucede esto lo que hay que hacer es ponerle una bombona para que vuelva a respirar. Sin en lugar de eso tratamos de taparle la boca, lo más probable es que muera asfixiada. Y si eso sucede, yo al menos estoy seguro que por el camino se perderán muchos sentimientos, muchos puntos de encuentro, y algunas discusiones y controversias. Incluso perderemos la posibilidad no sólo de que alguien nos lea, sino de que alguien escriba. Y entonces.... no podremos ni siquiera perseguir sombras.

Creo que ya lo he entendido. BLACOS, es más un sentimiento, una emoción, algo inherente al propio ser humano, algo metafísico íntimo y emocionante pero oscuro y difícil de entender. Vamos que su ubicación en el espacio y en el tiempo es pura casualidad, para nada necesario, pues ya vivía, vive, y vivirá en ese limbo idílico e infinito en el que viven los sentimientos puros. Cualquier tema tiene cabida, en sí ninguno tiene ni la menor ni la mayor importancia, simplemente forman parte de un algo superior.
Será mejor así, tengo que modificar mi reflexión y mis cálculos de probabilidad y admitir que así podrá haber muchos más colaboradores que se arrimen a escribir sus disertaciones de libre pensamiento en esta sentimental página, y además como nos comenta Inma García, en su primera intervención; “ lo peor es ver páginas en blanco”.
Por cierto no he estado nunca en San Miguel, y los pantalones me los pongo cuando hace falta..
Sin más.

Vaya por delante que huyo de la polémica como el gato escaldado huye del agua. No me importa polemizar cuando se hace de una forma civilizada y con argumentos, pero la experiencia me ha enseñado que esto no existe, y al final por una u otra parte, o por todas las partes, se acaba cayendo en la descalificación, el desprecio e incluso en el insulto. Así que huyo de la polémica y sólo voy a contestar por alusiones. Y además voy a tratar de ser más claro que nunca. ¿Por qué digo en mi escrito de referencia que me agota perseguir sombras? Es una expresión tomada del mundo del boxeo y se aplica cuándo uno de los dos boxeadores golpea continuamente al aire, porque el rival huye con agilidad de sus puños. Al final ese boxeador no encuentra nunca a nadie enfrente, sus puños se estrellan en vacío porque su enemigo es una sombra, algo inconcreto, difuso, casi etéreo. Cuando se acerca para mirarle a los ojos y desentrañar su personalidad, sólo encuentra sombras en movimiento, que lo llevan de un lado a otro del ring sin encontrar el cuerpo de su rival. Y al final acaba agotado y casi siempre termina perdiendo el combate sin conocer la identidad de su oponente, sin saber contra quien ha luchado. Creo que queda claro lo que quiero decir. Bien, sigo con la misma intención de claridad. La emoción o el sentimiento es algo propio del ser humano, pero discrepo de que sea algo inherente al ser humano. El mundo está lleno de ejemplos de seres humanos que ni siente ni padecen y dudo mucho de que se emocionen. Se lo podemos preguntar a cualquier desahuciado por no poder pagar la hipoteca o a cualquiera de los seis millones de parados de este país cada vez que se enfrentan a la humillación de visitar una oficina de empleo. Pero por encima de estas dudas, tengo la certeza de que ni el sentimiento ni la emoción son algo metafísico. Basta con observar a un padre o a una madre cuando miran a su hijo para darse cuenta que es una reacción tan humana como terrenal. La filosofía que estudia al ser humano como tal, que es una de las definiciones de la palabra, está muy lejos de comprender algunos sentimientos y emociones porque es algo que unos seres humanos los tienen y otros ni los tienen ni los conocen.
Es verdad que Blacos tiene una ubicación casual en el espacio y en el tiempo, como cualquier otra localización física que nos ha venido dada. Nuestro mérito, nuestro gran mérito es preservar ese lugar, darle vida, ayudar a su permanencia y rodearlo de sentimientos. Pero sentimientos de los que ocupamos el espacio físico. Blacos como cualquier otro pueblo es lo que son sus gentes. Si no fuera así estaríamos hablando simplemente de un lugar neutro y predeterminado. Pero de ahí a decir que como es casual es innecesario hay un abismo. Le podemos preguntar, por ejemplo a alguien que le haya tocado la lotería, por casualidad, si el premio es innecesario. Como puede apreciarse, nada es oscuro y la dificultad para entenderlo ya depende de las capacidades de cada uno.
Identificar a Blacos con el limbo muestra como mínimo desconocimiento. Y hablar de limbo idílico no deja de ser una redundancia, o tautología si queremos seguir filosofando, porque todo lo que no existe y queremos darle alguna existencia lo que hacemos es idealizarlo. El limbo no existe, no contiene materia, por lo que está más cerca de lo idílico que de lo certero. En lo que sí estoy de acuerdo es que los sentimientos puros están en el limbo. Es fácil de entender que cualquier sentimiento humano se contagia de ese ser humano, como imperfecto que es. Me parece más grave decir que cualquier tema tiene cabida pero que no tiene la mayor importancia. Lógicamente si alguien quiere imponer el contenido de la página, quiere imponer sus criterios al que escribe, eso es lo que normalmente se conoce como censura. Y a ti te parecerá que no tiene importancia hablar, por ejemplo, de cuando un grupo de estudiantes, con fama de vagos, picamos el suelo del viejo Ayuntamiento y lo cubrimos de hormigón. Todo con nuestras propias manos. O hablar de ese verano que fuimos capaces de aprendernos de memoria una obra de teatro, de lenguaje enrevesado, e intentar interpretarla en público. Te parecerá poco importante, pero estoy seguro que hay muchos que piensan lo contrario. Todo esto forma parte del mundo terrenal, de nuestro mundo de juegos infantiles, devaneos juveniles o de cenas de madurez. Esto sí que se vive a través de los sentimientos. A mí se me escapa que cualquiera de estas cosas formen parte de algo superior. Mi relación con la fe nunca me ha llevado a instalarme en un limbo idílico y desde allí ver pasar la vida.
Es probable que nada de lo que dices o de lo que digo yo contribuya a que haya más escritores en esta página. Pero me temo que si alguien, no superior evidentemente, quiere establecer el guión, lo que nos vamos a encontrar es el mundo del silencio, las páginas en blanco de Inmaculada. Y para mí, una página en blanco es como perseguir sombras por el folio para poder leer algo que está en el limbo, porque nadie lo ha escrito.
Con todo el cariño del mundo, y sin la más mínima "sombra" de rencor o de entablar agrias polémicas.
Respuestas ya existentes para el anterior mensaje:
Está bien todo lo que dices, pero antes de aplicar esa rotundidad a tus definiciones, convendría que releas lo que tu mismo has escrito anteriormente, y verás que incluso has aplicado la misma rotundidad a las que ahora te contradices. Claro que con las vueltas que das sobre cuatro notas, como bailarina de pasodoble levantando sin parar los volantes del vestido y las puntillas y meneando sin parar el abanico para que todo el mundo lo vea bien, es fácil marearse y no recordar todos los movimientos y vueltas y revueltas, aunque hayan sido sobre si mismo.
Centrarse en el tema o interés fundamental general no es censura, es precisamente lo contrario, es profundizar en el mismo para poder llegar todos al máximo conocimiento, aportando cada uno generosamente y gratuitamente sus conocimientos y opiniones en beneficio del grupo y del propio tema, en este caso BLACOS. No me imagino en una reunión en Bruselas para tratar el tema de las medidas a seguir para combatir la crisis, que algún representante político de alguno de los países de la Comunidad Económica Europea, base su discurso en la cría en cautividad del jilguero flauta.
Yo tampoco quiero entrar en polémica, entre otras cosas porque mi intención era precisamente la contraria a lo que estoy provocando. Pensaba y pienso que esta página tiene que ser una ventana abierta al mundo, para que se asome todo el que tenga necesidad o curiosidad, por la causa que fuere, de conocer el presente, el pasado y el futuro de BLACOS, con sus gentes, sus paisajes, su historia, su realidad, y no en un dialogo cerrado y personal sin apenas márgenes. Un chiste de chinos o un comentario íntimo de un primo a otro está muy bien, pero no creo que es lo que espera encontrarse alguien que busca refugio sentimental o simplemente información desde un lugar de Barcelona, Paris, Buenos Aires o cualquier otro rincón del mundo, en el que puede vivir incluso un blaquense de tercera, cuarta o quinta generación.
Los sentimientos si son inherentes al ser humano y la sombra nunca se puede esquivar siempre sigue ahí, a tu lado.
El silencio es el único amigo que jamás traiciona.
Sin más. ... (ver texto completo)