BLACOS: Fue en el puente del Pilar en Blacos. Eran setas de...

Fue en el puente del Pilar en Blacos. Eran setas de cardo y estaban muy buenas. Fue una de las pocas satisfaciones en un fin de semana que casi no paró de llover. La noche del domingo al lunes era espectacular, con uan niebla intensa a la altura de los tejados. Y minutos después había desaparecido como por arte de magia y sólo había quedado un rastro cubriendo el cauce del río "Milanos". A estas alturas lo único bueno que tiene trasnochar es observar algunos fenómenos naturales. Mucho mejor era en aquellos tiempos que a la sombra de la noche podías vivir o descubrir amores furtivos, entregados e incluso obsesivos, de los que te pueden marcar toda la vida y de los que llega un momento en el que ya no puedes guardarlos dentro, debes explotar y sacarlos a la superficie, compartirlos para disminuir el dolor o simplemente recitarlos de la mejor manera que sepas o puedas. Cuando haces eso si hay sinceridad, y no seré yo quien dude de Juana, no se puede hablar de cursilería Lola. La manera de expresarse de cada uno es tan singular como propia y lo que a unos puede parecer cursilería a otros les puede parecer un tesoro literario. Eso sí, siempre que sea un texto sincero y no una copia disimulada de un texto que en su día también fue sincero.
De todas formas paciencia, que el detective de Barkaldo se ha puesto manos a la obra y ya está termiando la colección completa de Agata Christie. No creo que el caso de Juana sea más difícil que lo que cuentan estos libros.
Por cierto Rául, la historia de las carboneras de Blacos la puedes ver en una excelente película sobre el tema. Seguro que la conoces porque se titula "Tasio", de Montxo Armendáriz. El relato sucede en Navarra pero en algo, por lo que a mí me han contado, es similar a la de Blacos. Besos.