El secretario es un cáncer para el pueblo.
Si el Ayuntamiento no quiere echarle, quizás habría que cambiar al Ayuntamiento, e intentar limpiar todo un poco. Que todo sea un poco más cristalino y que las decisiones sobre el futuro del pueblo se tomen en la Casa Consistorial.
Si el Ayuntamiento no quiere echarle, quizás habría que cambiar al Ayuntamiento, e intentar limpiar todo un poco. Que todo sea un poco más cristalino y que las decisiones sobre el futuro del pueblo se tomen en la Casa Consistorial.