Mi padre nació en
moral de hornuez, por ello le visito con frecuencia, es un
pueblo que me encanta; al no tener
casa, solo le visito en plan de pasar el día, tambien visito hornuez y su estupenda
ermita, contemplando sus enormes sabinas, disfrutando de su bonita pradera y de sus
fuentes de
agua.
Me gustaría que en moral hubiese una
casa rural para poder pernoctar.
En los últimos años se están construyendo estupendas
casas, pues me alegraría que siguiese así.