Torre airosa y hermosa, coronada por el nido de la cigüeña encima de la campa del reloj, que sobresale por encima del edificio del ayuntamiento. Este último, parece mentira que haya sido proyectado y construido por autoridades, debería haber seguido la misma línea que la torre, hubiera quedado hermosísimo e integrada la torre en el conjunto; lastima de dirigentes que destrozan el patrimonio rural haciendo edificios públicos sin personalidad, desentonando con el conjunto y sin utilizar la materia constructiva de la zonas, que dicho sea de paso, abunda. Este tipo de construcción es igual o similar a la de cualquier otro lugar donde no se observa ni cuida el patrimonio de un pueblo.