No debe ser una casualidad que todos los edificios de vivienda tengan orientada su fachada principal hacia el sur; los antiguos “armadores” de Villorquite sabían construir casas con el máximo confort “climático” disponiendo de mínimos recursos para ello, mediante una simbiosis entre “sabiduría” y “respeto al medio ambiente” planificaban los edificios con la orientación más favorable respecto a la captación de la energía solar.
Asímismo, la utilización del adobe como material de construcción para los muros, material económico y eficaz, proporcionaba unas características de “comfort ambiental” difícilmente alcanzables mediante la tecnología actual. Esto se debe a que su característica de conductividad térmica de 0.25 W/mºC es aproximadamente la cuarta parte a la correspondiente al ladrillo actualmente utilizado.
Como consecuencia, estos edificios disponen de ambientes interiores menos fríos en invierno y menos calurosos en verano.
La construcción típica utilizaba la técnica de entramados de madera de roble, también llamada “poste y carrera”. Los entramados se rellenaban de piezas de adobe, colocadas a “soga” o en “espina”. No es de despreciar la consistencia de estas técnicas constructivas pues algunos de éstos edificios ya habrán superado la edad de 400 años.
Asímismo, la utilización del adobe como material de construcción para los muros, material económico y eficaz, proporcionaba unas características de “comfort ambiental” difícilmente alcanzables mediante la tecnología actual. Esto se debe a que su característica de conductividad térmica de 0.25 W/mºC es aproximadamente la cuarta parte a la correspondiente al ladrillo actualmente utilizado.
Como consecuencia, estos edificios disponen de ambientes interiores menos fríos en invierno y menos calurosos en verano.
La construcción típica utilizaba la técnica de entramados de madera de roble, también llamada “poste y carrera”. Los entramados se rellenaban de piezas de adobe, colocadas a “soga” o en “espina”. No es de despreciar la consistencia de estas técnicas constructivas pues algunos de éstos edificios ya habrán superado la edad de 400 años.
