Calle de subida, VENTANILLA

¡Cuántas veces subí y bajé de niño esta calle, la de la Peña, hasta la carretera para ir en cal Coronilla, siempre comprábamos algo. ¡Qué amable la señora Matilde! Bernardo siempre atento, ahora su hijo sigue los pasos. ¡Qué felicidad! Es lugar de encuentro.