Sí que es penoso Santi, sí. Es muy duro ver trasformados en lodazales, lo que otrora fueran fértiles campos.
Desde Renedo de Zalima, en dirección a Aguilar y dejando a la derecha Villanueva del Rio, que aparecía al final del maraviloso valle que el Pisuerga hacía posible, y a la izquierda Cenera, trascurria la carretera en medio de un madrigal de campos de trigo, cebada, avena y comuña. Estos campos vistos en primavera, eran la inmensidad vestida con variedad de verdes, y todos ondulantes bajo la...
Desde Renedo de Zalima, en dirección a Aguilar y dejando a la derecha Villanueva del Rio, que aparecía al final del maraviloso valle que el Pisuerga hacía posible, y a la izquierda Cenera, trascurria la carretera en medio de un madrigal de campos de trigo, cebada, avena y comuña. Estos campos vistos en primavera, eran la inmensidad vestida con variedad de verdes, y todos ondulantes bajo la...