Con respecto a lo que nos cuenta Pablo sobre las vacas sueltas en la cuadra del Sr Sebastían, también lo recuerdo, porque me lo contó Pepi que en su casa estaban verdaderamente asustados: el caso es que las cadenas aparecieron abrochadas y bien colocaditas sobre los pesebres,... para más intríngulis... Otra de los comentarios que nos hacía Pepi, era sobre los neales, que desaparecían del lugar donde los colocaba la Sra Felipa y aparecían en los lugares más inverosímiles del corral, o del pajar... con lo que las gallinas decidieron poner los huevos en el lugar que les daba la gana; si que recuerdo, que en su casa lo mismo aparecía un huevo en medio del corral, como en la mesa de la cocina, como en la esquina del portal... y sí, esa costumbre de las gallinas cambió cuando se fueron a vivir a la casa que os digo de Perón, allí el Sr Sebastian puso un par de neales en sendos vanos de la cuadra y las mismas gallinas disciplinadamente y por turno hacían su puesta convenientemente.
En cuanto a los asaltos a los huertos, los chicos érais bastante más atrevidos que las chicas: Si recuerdo las visitas que hacían a las fresas de D. Balbino y a las de la Sra Amalia, y las respuestas dadas por sus dueños.
Y por último respecto al buey y a la vaca de mi padre que se perdieron en la LLana, si recuerdo, que eran el Rogante y la Airosa, después de la trilla, les llevó a pastar mi hermano Agustín a la pradera y se presento una gran tormenta, de modo y manera que Agustín arreó para casa con las vacas que le fue posible, porque la Airosa y el Rogante, con los truenos se escaparon de la manada y comenzaron a correr y no pararon hasta la Llana, el chaval estaba tremendamente asustado, pese a que mi padre ya le dijo que cuando acabara la tormenta irían a buscarlas, pero la tormenta no amainó hasta bien entrada la noche. A la mañana siguiente, mi padre fue y les encontró en dicho lugar pastando tranquilamente.
Iré ordenando todas estas cosas en nuestro anecdotario,.
un saludo para tod@s
Mª José
En cuanto a los asaltos a los huertos, los chicos érais bastante más atrevidos que las chicas: Si recuerdo las visitas que hacían a las fresas de D. Balbino y a las de la Sra Amalia, y las respuestas dadas por sus dueños.
Y por último respecto al buey y a la vaca de mi padre que se perdieron en la LLana, si recuerdo, que eran el Rogante y la Airosa, después de la trilla, les llevó a pastar mi hermano Agustín a la pradera y se presento una gran tormenta, de modo y manera que Agustín arreó para casa con las vacas que le fue posible, porque la Airosa y el Rogante, con los truenos se escaparon de la manada y comenzaron a correr y no pararon hasta la Llana, el chaval estaba tremendamente asustado, pese a que mi padre ya le dijo que cuando acabara la tormenta irían a buscarlas, pero la tormenta no amainó hasta bien entrada la noche. A la mañana siguiente, mi padre fue y les encontró en dicho lugar pastando tranquilamente.
Iré ordenando todas estas cosas en nuestro anecdotario,.
un saludo para tod@s
Mª José