Indudablemente, los "amigos de lo ajeno", actúan sin consideración. recuerdo hace dos años, y tú, Charo, conoces el lugar, en la Abadía de Cobreces, los religiosos acogen a los peregrinos, le dan cama e incluso les ayudan en la manutención; tenían en la entrada de dentro de la abadía un teléfono de monedas, imaginamos que no muchas, porque la gente ya usaba los móviles, pero para una emergencia solucionaba; alguien, y lógicamente debió de ser alguno de éstos desaprensivos, (afortunadamente la mayoría de los peregrinos, por no decir todos, son legales y respetuosos), arrancó el teléfono y se lo llevó, y lógicamente, ahora solo queda el cable cortado y los agujeros.
Hasta ese punto llegan estos impresentables.
En fin que no nos libraremos de semejantes lacras nunca.
Es por esa zona de Castilla-León, Cantabria, donde hay un patrimonio artístico fenomenal, y gracias a estos sujetos casi no se puede apreciar con tranquilidad y tiempo por sus hurtos.
Esperemos que se solucione, y mientras os mando un recuerdo afectuoso a todos/as.
Eduardo.
Hasta ese punto llegan estos impresentables.
En fin que no nos libraremos de semejantes lacras nunca.
Es por esa zona de Castilla-León, Cantabria, donde hay un patrimonio artístico fenomenal, y gracias a estos sujetos casi no se puede apreciar con tranquilidad y tiempo por sus hurtos.
Esperemos que se solucione, y mientras os mando un recuerdo afectuoso a todos/as.
Eduardo.