CAMASOBRES: Lo que no se, pero seguro que alguno lo recuerda quien...

Alejandro que es el Fielato.

Saturnino, los fielatos son un invento de la primera mitad del siglo XX. Yo les he visto funcionar, especialmente en Palencia. Era una forma de sacar dinero a la gente, que tenía que pagar una cantidad (dependía del valor de la mercancía) cuando introducían alimentos en la ciudad. Por eso les había en todas las entradas de la ciudad por carretera o ferrocarril. Esta caseta es singular. La Diputación la levantó para cobrar un impuesto a todo lo que se introducía desde (entonces) Santander... Hoy es algo ridículo...

Alejandro no tenia ni idea, me he quedado realmente
boquiabierto ante tu respuesta, tratare de saber
mucho más me parece algo realmente curioso y
chocante. Muchas gracias.

Lo que no se, pero seguro que alguno lo recuerda quien era la persona que lo llevaba. El principal objeto del fielato de Camasobres era cobrar el paso de las vacas que a docenas pasaban el Puerto camino de las ferias de Cervera. En Palencia eran empleados del Ayuntamiento con una paga tan corta que los sobornos estaban a la orden del día. Las había a la salida de las estaciones, a la entrada por la pasarela de Villalobón, a las entradas desde Valladolid y Burgos y la más desesperante, la que había en el Puente Mayor para cobrar a los cazadores que venían del Monte con su caza o traían uvas u otras cosas de esa zona, además de los que venían de Tierra de Campos por Allende el Río... Y eran tiempos de escasez que nos hacen reír a los que conocimos esa época, en comparación con los lamentos de ahora y la ¡terrible crisis actual! que permite salir de vacaciones a 27 millones de personas... cuando esa palabra, vacaciones en la playa o en la montaña, eran desconocidas en los años cuarenta...
Respuestas ya existentes para el anterior mensaje:
Razón tienes nos quejamos mucho, y realmente los
que tenemos entre 50 y 55 no lo hemos pasado mal,
no hemos pasado hambre, ni otra serie de necesidades,
yo la oía a mi madre y ahora recuerdo lo de los velatorios,
el rascar el jamon para tener sal, el aceite apenas si se
conocia, las galletas en la cesta, coser con cinco agujas
para her los calcetines, y más cosas que convendría recordar
y recoger, ciertamente nos quejamos y no tenemos razón para
hacerlo, la posguerra según me contaron fue muy dura. ... (ver texto completo)