Sin embargo, ayer no era el día de los políticos, sino de los mineros, pues la huelga del sector fue ayer seguida al cien por cien en todo el territorio nacional.
Tras la manifestación de ayer va a resultar muy difícil desatender las justas peticiones de unos trabajadores que lo único que pretenden es cobrar su salario y que su sistema de vida no esté perpetuamente en entredicho ni sometido a las tensiones políticas de Madrid y de Bruselas.
Entre las reclamaciones inmediatas, además del cobro de las nóminas, está la de que se apruebe de una vez el Real Decreto que debe dar estabilidad al sector, pero, tan importante como esa, subyace la lucha por la defensa de una forma de vida y de un sector económico al que el Bierzo y Laciana deben prácticamente todo lo son hoy día.
Tras la manifestación de ayer va a resultar muy difícil desatender las justas peticiones de unos trabajadores que lo único que pretenden es cobrar su salario y que su sistema de vida no esté perpetuamente en entredicho ni sometido a las tensiones políticas de Madrid y de Bruselas.
Entre las reclamaciones inmediatas, además del cobro de las nóminas, está la de que se apruebe de una vez el Real Decreto que debe dar estabilidad al sector, pero, tan importante como esa, subyace la lucha por la defensa de una forma de vida y de un sector económico al que el Bierzo y Laciana deben prácticamente todo lo son hoy día.