Una vez incorporado a vuestro foro, castellanos de mas allá del Guadarrama, que de frente, hacia el Norte, alumbró de sus nevadas cumbres, los avispados ojos de un niño: suficiente avispados, como para hoy, muchos años después, en belenes de palomas ausentes, escribirme, cantando, no sin tristeza mi particular villancico.

Legue en un áspero camino;
turbados sus amaneceres
viendo pereces mis trigos
verde en mis campos verdes...
brillantes en villancicos
antes de partir las aves.

Antes...