Hola a todos,
Me alegro q te haya gustao y emocionao lo q escribí Auro, la veda q no lo hice con esa intención, simplemente me fue saliendo... y ahí lo planté, y ahora lo he releido y la verda ye q no qdó mal, pa la prisa con q lo hice, q ayer hizoseme tardísimo.
Yo tb he pensado escribirlo alguna vez, Mateselu, para q qede para siempre un recuerdo tan precioso, lo q pasa q no me considero capaz de escribir... bien.
Lo he pensado sobre todo a raíz de leer de nuevo Platero y yo... es un libro tan bonito, se desarrolla en un pueblo de Huelva, Moguer, pero para mí es como si fuera Babia mismo, pues parece q las emociones q síntió Juan Ramón Jimenez allí, son las mismas q sentí yo en Babia, otro lugar, otros animales, otros arboles y otros ríos pero la misma emoción y sentimiento inexplicable al estar en esa Naturaleza preciosa... al recordarme sentada junto al río, con tanto silencio y tranquilidad, con aire tan puro y fresco... Os recomiendo q leaís Platero y yo. A mi hermana se lo voy a llevar yo este finde a ver si le gusta.
Hay un pasaje de la tormenta... que me recordó especialmente a Babia... y debajo lo escribí.
Qué bonito ese recuerdo... parece q ahora mismo siento el frío y aquel ligero miedo o susto más bién, q sentíamos cuando venía una de esas tormentas fuertes de verano... tan cerca de la peña la tormenta (como nos decía Fidel) que parecía cuando el trueno venía- siempre unos segundos después del rayo- q iba a caer la casa... cómo llovía... sobre los cristales de la salita- la galería- ´q fuerte lluvia, q tb parecía q iba a romper los cristales, y q rápido escampaba, y volvía el sol, y se iba el miedo... el susto duraba poco, admás yo con mis abuelos y mi hermana dentro de casa, me sentía segura, y sabía por otras veces que pronto volvería a reinar el sol en ese precioso cielo azul, que tiene Babia, y saldríamos a jugar, otra vez, y juntas Auro y yo, casi siempre juntas...
EStoy segura, auque no recuerdo bien... q si alguna vez yo despertaba antes q ella (lo cual es raro, xq siempre fue muchoooo más madrugadora q yo), en esas mañanas de olor a café recien hecho y a prender la cocina, pués seguro q yo la despertaba a ella... por que yo no podía tar sin ella, no podía tar sóla... me aburría, y lo pasaba mal. EN cambio ella siempre fue muy independiente... y en su mundo y con sus planes... siempre estaba feliz, sóla o acompañada. Sin embargo yo dependía mucho de ella.
Luego hubo un tiempo, a los 14 cnd fui adolescente q no queria q ella viniese conmigo pa q no me viese fumar... pero pronto me vió, en el Oteiro... y yo sabía q podía confíar en ella, así q eso de q no viniese conmigo sólo fue unos días, claro a los 14 una de 12 te parece... de otra generación... Cosas de niñas.
Tb pasé una época anterior a esa q no quería yo q nos vistiesen iguales, pero esa tb pasó rápido... pues en realidad fuimos muchos años iguales vestidinas... a mi madre le gustaba, supongo.
Luego ya nos hicimos mayores y cada una compraba lo suyo, Auro empezaba a hacerse adolescente y a presumir y me cogía toda la ropa, aveces sin avisar... y yo me enfadaba pero se la dejaba, y le daba cosas... y cnd me enfadaba se lo quitaba todo... luego me sentía mal y se lo devolvía... te acuerdas Auro?, tovía en Castiello debió pasar alguna vez, haz ya lo menos diez años, como pasa el tiempu.
Me alegro q te haya gustao y emocionao lo q escribí Auro, la veda q no lo hice con esa intención, simplemente me fue saliendo... y ahí lo planté, y ahora lo he releido y la verda ye q no qdó mal, pa la prisa con q lo hice, q ayer hizoseme tardísimo.
Yo tb he pensado escribirlo alguna vez, Mateselu, para q qede para siempre un recuerdo tan precioso, lo q pasa q no me considero capaz de escribir... bien.
Lo he pensado sobre todo a raíz de leer de nuevo Platero y yo... es un libro tan bonito, se desarrolla en un pueblo de Huelva, Moguer, pero para mí es como si fuera Babia mismo, pues parece q las emociones q síntió Juan Ramón Jimenez allí, son las mismas q sentí yo en Babia, otro lugar, otros animales, otros arboles y otros ríos pero la misma emoción y sentimiento inexplicable al estar en esa Naturaleza preciosa... al recordarme sentada junto al río, con tanto silencio y tranquilidad, con aire tan puro y fresco... Os recomiendo q leaís Platero y yo. A mi hermana se lo voy a llevar yo este finde a ver si le gusta.
Hay un pasaje de la tormenta... que me recordó especialmente a Babia... y debajo lo escribí.
Qué bonito ese recuerdo... parece q ahora mismo siento el frío y aquel ligero miedo o susto más bién, q sentíamos cuando venía una de esas tormentas fuertes de verano... tan cerca de la peña la tormenta (como nos decía Fidel) que parecía cuando el trueno venía- siempre unos segundos después del rayo- q iba a caer la casa... cómo llovía... sobre los cristales de la salita- la galería- ´q fuerte lluvia, q tb parecía q iba a romper los cristales, y q rápido escampaba, y volvía el sol, y se iba el miedo... el susto duraba poco, admás yo con mis abuelos y mi hermana dentro de casa, me sentía segura, y sabía por otras veces que pronto volvería a reinar el sol en ese precioso cielo azul, que tiene Babia, y saldríamos a jugar, otra vez, y juntas Auro y yo, casi siempre juntas...
EStoy segura, auque no recuerdo bien... q si alguna vez yo despertaba antes q ella (lo cual es raro, xq siempre fue muchoooo más madrugadora q yo), en esas mañanas de olor a café recien hecho y a prender la cocina, pués seguro q yo la despertaba a ella... por que yo no podía tar sin ella, no podía tar sóla... me aburría, y lo pasaba mal. EN cambio ella siempre fue muy independiente... y en su mundo y con sus planes... siempre estaba feliz, sóla o acompañada. Sin embargo yo dependía mucho de ella.
Luego hubo un tiempo, a los 14 cnd fui adolescente q no queria q ella viniese conmigo pa q no me viese fumar... pero pronto me vió, en el Oteiro... y yo sabía q podía confíar en ella, así q eso de q no viniese conmigo sólo fue unos días, claro a los 14 una de 12 te parece... de otra generación... Cosas de niñas.
Tb pasé una época anterior a esa q no quería yo q nos vistiesen iguales, pero esa tb pasó rápido... pues en realidad fuimos muchos años iguales vestidinas... a mi madre le gustaba, supongo.
Luego ya nos hicimos mayores y cada una compraba lo suyo, Auro empezaba a hacerse adolescente y a presumir y me cogía toda la ropa, aveces sin avisar... y yo me enfadaba pero se la dejaba, y le daba cosas... y cnd me enfadaba se lo quitaba todo... luego me sentía mal y se lo devolvía... te acuerdas Auro?, tovía en Castiello debió pasar alguna vez, haz ya lo menos diez años, como pasa el tiempu.
