.... Un
médico: llamarse Aquiles y apellidarse Mato.
.... Un ingeniero: tener la boca llena de
puentes.
.... Un
abogado: perder el juicio.
.... Un astronauta: estar cerca de las estrellas
y no poder pedirles un autógrafo.
.... Un escritor: que su mujer le sirva sopa de letras.
.... Un sastre: tener un hijo botones.
.... Un peluquero: que le tomen el pelo.
.... Un jardinero: que le dejen plantado.
.... Un carpintero: llamarse Armando y apellidarse
Puertas.
... (ver texto completo)