Mientras la gente estaba en la Iglesia, dejaban las madreñas en el portal, y la diversión favorita de los guajes era emparejarlas de manera diferente a como las habían dejado sus dueños. se prepara un fregao impresionante, pero que no te pillaran cerca riendote, porque no te escapabas sin un bofetón. Esta broma tambien se la soliamos hacer a los hombres mientras estaban en la cantina (bar). Se acabó perdiendo ya que la gente aprendió a entrar en los sitios con las madreñas calzadas.
Otro de los sitios en que se mezclaban las madreñas era en la escuela.
Todo la gente calzaba madreñas, hoy solo las hay en los museos y las ferias de artesanía subencionadas
Otro de los sitios en que se mezclaban las madreñas era en la escuela.
Todo la gente calzaba madreñas, hoy solo las hay en los museos y las ferias de artesanía subencionadas