ARDON: ¡Hola Fernan!...

¡Hola Fernan!
Cumpliendo con lo anunciado el pasado 18/4/2.014, paso a comentar algo más sobre las cuevas de Canal de la Horca, pago en el que está ubicada la que ilustra el comentario.
Justo a tu espalda, al sacar esta foto, y a la derecha del Camino Real, cuando comienza la cuesta de subida a "Los Demediantes", se ubican dos cuevas que tienen un mismo túnel de acceso desde la calle hasta sus puertas respectivas de entrada: por la puerta de la izquierda se pasa a la de Honorina, "La Cartera"; es la que linda con el camino, tiene la lagareta a media cuesta y -sus dueños- siempre ponían piedras y estacas con alambres de espinos para tratar de impedir que el ganau de la vecera y las ovejas hicieran senderos por las laderas de los ventanos. Por la puerta de la derecha, al final del túnel, se entra en la de Adolfo Escapa, "El Peluquero"; hoy tiene tabicada la puerta por deterioro del primer ventano; en más de una ocasión merendé en esta cueva con la cuadrilla.
Las dos siguientes fueron de "el tío Ciriaco", Ciriaco Rey: la que linda con la anterior la heredó su hijo Serapio, que la vendió y hoy creo que es de alguien de León, no se de quien, y tiene la lagareta en la parte trasera; la otra la heredó otro hijo, Ambrosio, y ahora tengo entendido que su propietario es Gerardo.
A continuación hay otras dos que comparten acceso desde la calle: la que linda con la anterior era del tío Vitorio, "El Artillero", hoy de su hijo Avelino; tiene lucera en la parte posterior, lo que facilita una buena ventilación de la cueva, de lo cual puedo dar fe pues ocasiones hubo en que participé en meriendas en la misma, al igual que en la anterior y en las dos siguientes que comentaré.
A continuación está la de Ubaldo Casado, durante algún tiempo Alcalde Mayor del Ayuntamiento, que la heredó de su padre, "el tío Maximino", y hoy es de Maribel; siguiendo costumbres ancestrales arraigadas en el pueblo, hacer presentes al cura y al maestro en ocasiones señaladas, algunos garrafones de vino salieron de esta cueva, para regar la comida de los curas el día del Corpus, como presente del dueño.
Termina el grupo de las que quedan en el lado izquierdo de la explanada con la que fue de Petronilo, "El Herrero", posteriormente de Goyo y hoy de Estrella. ¿Qué puedo contarte yo de esta cueva que tú, Fernan, no sepas?
Está perfectamente arreglada, como se puede apreciar en fotografía colgada en otra ventana, y aunque ya no se dedica a la crianza de vinos, cuando se entra en ella y se reactiva la memoria, automáticamente saltan los resortes que estimulan los sentidos y uno sueña con la calidad de los que produjo, aquellos que tanto la ennoblecieron: espero no quedarme corto al decir que, en ella, allá por los años 40 - 50 del siglo pasado, se celebraron comidas estelares, tanto por la calidad y variedad del abundante condumio, como por el número e impronta de los participantes, muchos de ellos tramontanos, amén de las habituales meriendas, más discretas y castizas, aunque todas igualadas por el denominador común, el excelente vino.
¡Lástima de tiempos aquellos!
Orgánicamente, la cueva, tiene dos lagares, con su correspondiente viga cada uno de ellos, y dos lagaretas, varios nichos con cubas y una lucera que desde media altura, más o menos, del último ventano comunica con el exterior por detrás...
Todas las cuevas descritas, desde la de Honorina hasta esta última de Petronilo, ambas inclusive, eran conocidas por un nombre genérico común, "Cuevas de la Marquesa", y se comunicaban entre sí sucesivamente por unos pasillos que tenían al fondo, uno hacia la derecha y otro hacia la izquierda, excepto las dos de los extremos que obviamente solo tenían uno; estos pasillos fueron todos tabicados, dando total independencia a cada una de ellas, salvo en el caso de las dos del tío Ciriaco; aquí, aunque se hizo el tabique correspondiente, se colocó en él una puerta fuerte y con cerradura combinada de cinco resortes.
Es de destacar que la segunda del anteriormente citado, la que hoy es de Gerardo, es la única que desde su construcción tiene protección arquitectónica especial, tanto en el interior (arcos y bóvedas de cañón de medio punto con fábrica de ladrillos para evitar potenciales derrumbes) como en el exterior, pues en la doble fachada similar (de la cueva y de la lagareta respectivamente) se puede apreciar la impronta de la construcción primigenia, mucho más fuerte y consistente que las de las demás. Esto induce a pensar que ésta fuera la auténtica "Cueva de la Marquesa", derivando posterior y genéricamente el nombre a las demás, ya que quizá fueran todas utilizadas en un momento dado por un mismo cosechero, razón del pasillo de intercomunicación interior.
Sobre el resto de las cuevas de este pago, las que están en el mismo lado que las de la foto, si os resultan interesantes los comentarios ¿...?, seguiré otro día.
Por otro lado, es posible que alguien pueda ampliar la información o corregir algo de lo que digo; agradeceré vuestros comentarios al respecto.
Un cordial saludo.
Un paisano de Sabino Ordás.
Respuestas ya existentes para el anterior mensaje:
¡Hola a todos!
“Paisano” con la descripción de los titulares de las bodegas de esa zona del pueblo solo me resta poner las fotos, “casualidad”, y creo que no te estaba leyendo tu pensamiento. A ver si pongo bien el nombre de los antiguos propietarios.
Lo del bar de los hermanos tal como era.
¿Tenemos alguna explicación a lo de las cuevas de la Marquesa?
¿Y la cueva saqueada?
Un saludo cordial para todos.
A orilla del Esla.