Recuperación del "Pendón" (Pastel), ARDON

Tras muchos años de olvido, el Pendón, volvió a salir. Aquel momento lo interpreté con el pastel que hoy cuelgo.
El verano pasado volví a disfrutar de esa manifestación festiva que nos proporciona el pasearlo y, además, me sorprendió muy gratamente ver la pradera tan verde. Ese gusanillo que todos llevamos dentro, cuando se trata de las cosas del pueblo, me predispuso a la reflexión y surgió algo que transcribo para vosotros, dedicándoselo a los/as que cada año hacen lo posible para que la fiesta continúe.

El pendón

Hay fiesta en la ermita verde
- dulzaina, gaita y tambor -.
Con vestidos de domingo y mejor disposición,
vino la gente del pueblo:
del barrio alto bajó,
sólo por echar el rato y ver bailar el pendón.

En las zarzas de la cuesta,
junto a la fuente de tierra,
tiene el nido un ruiseñor
que trina al son de la gaita,
cuando enmudece el tambor;
ya se arranca la dulzaina...,
¡los tres le cantan al sol!

Entre los plateados chopos
fluye un caudal..., un hilito de ilusión,
y hay una jarra de barro,
de barro de "perigüela", pero que nunca se llena.
Tras el pendón rojo y verde,
¡la enseña!,
volverá en masa la gente
por la orilla de la cuesta.

Un paisano de Sabino Ordás
(Agosto de 2000)
¡Hola, a todos!
Permitidme que nuevamente felicite a nuestra enseña local por su presencia en la capital en el día de hoy, pero sobre todo porque ha estado asistido por jóvenes de nuestro pueblo. A éstos les agradezco en tu nombre su actitud al tiempo que les muestro mi reconocimiento personal.
Saludos.
Un paisano de Sabino Ordás.
¡Hola, a todos!
Aunque con un mes de retraso -debí hacerlo el día que volviste a pasearte por las calles y la Ermita del pueblo- no quiero dejar de felicitarte por la hazaña: resurges de tus propias cenizas, como el fénix, y lo haces con suma delicadeza, sin molestar a nadie. ¡Felicidades!
Por otro lado, mi agradecimiento a quienes han hecho posible esta nueva aparición.
Un saludo para todos.
Un paisano de Sabino Ordás.
¡Hola, a todos!
Si el 26 - XII - 2.014, cuando consideré que en Ardón, la "Fiesta de Recuperación del Pendón", acordada en agosto del año 2.000, se había consolidado y colgué la fotografía de un pastel que hice en recuerdo del feliz acontecimiento, me sentí eufórico, hasta el extremo incluso de componer una canción lírica en su honor, hoy, último día de agosto de 2.016 me siento apesadumbrado, triste...: dicha fiesta ha sido abolida como tal.
Este estado de ánimo me ha llevado a componer el siguiente...