Este fin de semana he estado en
San Esteban de Nogales. Ha llovido con fuerza pero cuando escampaba, el
cielo estaba cubierto con nubes de algodón que cambiaban con el viento suave y fresco, oxigenando los pulmones. Con la
lluvia el entorno tiene un verde matizado de varios tonos.
Ahora el
campo y el cielo está precioso.
Pero sigo reclamando "ARREGLAR LA
CARRETERA" Hasta La Porilla.
Un saludo. ROSARIO.