El monasterio se divide:
LA IGLESIA
La iglesia es majestuosa, de estilo churrigeresco, se inició en 1728, con una magnífica espadaña de 33 m. De altura, tres naves de estilo gótico y linterna de estilo plateresco preciosa. Capilla del S. XVI, muy bella. El retablo mayor de estilo renacentista, posee la imagen de Nuestra Señora de la Vid, de piedra policromada del S. XIV, de magníficas dimensiones, 1, 80 m. Que posee en su mano un ramo de vid, un imagen preciosa, digna de contemplar despacio. El altar mayo posee tallas y cuadros de la escuela napolitana.
Sacristía neoclásica, del S.XVII, la Sala Capitular conserva el sepulcro del fundador.
El claustro conserva restos del antiguo claustro románico.
BIBLIOTECA
De los fondos de la biblioteca durante los siglos en que habitaron la abadía los premonstratenses se sabe muy poco; no se ha conservado ningún inventario o documento similar que permita concebir la riqueza libraria que conservaba. Sin duda existieron en ella códices manuscritos, incunables y obras posteriores particularmente valiosas, pero con la desamortización de los bienes de las órdenes religiosas decretada por Mendizábal en 1835 se deshizo la colección premonstratense. Treinta años después, en 1865, cuando los agustinos se hicieron cargo del monasterio, quedaban exactamente 1.947 volúmenes amontonados y en pésimo estado de conservación.
MUSEO
La sala principal del Museo se encuentra instalada en un local de 239 m2 que forma parte del conjunto de construcciones realizadas en el s. XVIII. Durante doscientos años fue despensa y graneros de la abadía. Se han respetado y restaurado todos los elementos arquitectónicos originales, destacando y potenciando las tres grandes arcadas centrales. El acceso al Museo se realiza a través de un arco de medio punto desde el claustro principal, con lo que se encuentra dentro del recorrido habitual que realizan los visitantes de la casa. En el interior del local se ha creado un patio central que libera las arcadas y unas entreplantas a ambos lados a las que se accede por una escalera que distribuye con plataforma intermedia a media altura cada una de ellas. Los elementos arquitectónicos que se han introducido no afectan a la estructura original, pudiendo ser desmontados sin alteración de la obra antigua. En el Museo se muestran: Obras de orfebrería religiosa: custodias, cálices, copones, atriles, sacras, relicarios, etc. Datadas entre los siglos XVI y XIX.
LA IGLESIA
La iglesia es majestuosa, de estilo churrigeresco, se inició en 1728, con una magnífica espadaña de 33 m. De altura, tres naves de estilo gótico y linterna de estilo plateresco preciosa. Capilla del S. XVI, muy bella. El retablo mayor de estilo renacentista, posee la imagen de Nuestra Señora de la Vid, de piedra policromada del S. XIV, de magníficas dimensiones, 1, 80 m. Que posee en su mano un ramo de vid, un imagen preciosa, digna de contemplar despacio. El altar mayo posee tallas y cuadros de la escuela napolitana.
Sacristía neoclásica, del S.XVII, la Sala Capitular conserva el sepulcro del fundador.
El claustro conserva restos del antiguo claustro románico.
BIBLIOTECA
De los fondos de la biblioteca durante los siglos en que habitaron la abadía los premonstratenses se sabe muy poco; no se ha conservado ningún inventario o documento similar que permita concebir la riqueza libraria que conservaba. Sin duda existieron en ella códices manuscritos, incunables y obras posteriores particularmente valiosas, pero con la desamortización de los bienes de las órdenes religiosas decretada por Mendizábal en 1835 se deshizo la colección premonstratense. Treinta años después, en 1865, cuando los agustinos se hicieron cargo del monasterio, quedaban exactamente 1.947 volúmenes amontonados y en pésimo estado de conservación.
MUSEO
La sala principal del Museo se encuentra instalada en un local de 239 m2 que forma parte del conjunto de construcciones realizadas en el s. XVIII. Durante doscientos años fue despensa y graneros de la abadía. Se han respetado y restaurado todos los elementos arquitectónicos originales, destacando y potenciando las tres grandes arcadas centrales. El acceso al Museo se realiza a través de un arco de medio punto desde el claustro principal, con lo que se encuentra dentro del recorrido habitual que realizan los visitantes de la casa. En el interior del local se ha creado un patio central que libera las arcadas y unas entreplantas a ambos lados a las que se accede por una escalera que distribuye con plataforma intermedia a media altura cada una de ellas. Los elementos arquitectónicos que se han introducido no afectan a la estructura original, pudiendo ser desmontados sin alteración de la obra antigua. En el Museo se muestran: Obras de orfebrería religiosa: custodias, cálices, copones, atriles, sacras, relicarios, etc. Datadas entre los siglos XVI y XIX.