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ESCUDO E HISTORIA DE VILLANASUR RIO DE OCA VILLANASUR RIO DE OCA, como su nombre manifiesta, es una veterana Villa, situada a orillas del rio Oca, en el tramo que recorre el rio entre Villafranca Montes de Oca y Castil de Peones, o mejor, en el Valle que forma el dicho rio entre la carretera Nacional 1 (de Madrid a Francia). Aunqueel valle se orienta de Norte a Sur, su clima es sano y su terreno de buena calidad por su condición aluvial. VILLANASUR es un nombre que provoca algunas discursiones entre los filólogos por los tres componentes que lo forman: VILLA+N+ASUR. Villa no tiene dificultad de inteligencia y tampoco ASUR, nombre de varón bastante usado en la Alta Edad Media. La N intervocálica es lo que queda de la palabra DOMINUS, reducida al castellano DON. La Villa se apellidaría al principio DE DON ASUR y en nuestro auxilio viene un documento del archivo de San Millan de la Cogolla en el que claramente leemos VILLA DOMNO ASSUR, en el año 1007, VILLA DE DON ASUR. En la Provincia de Burgos tenemos dos ejemplares muy claros, los de Villangomez y Villandiego, en los que la letra N es lo único que nos queda del vocablo DOMINUS (Señor) y el abreviado DON que todavía usamos. Esta versión le merece todo el respeto al Cronista que suscribe, aunque un gran maestro de Historia mantiene que VILLANASUR son dos palabras: La latina VILLA y la árabe NASUR, que significa Águilas, por lo que la población debiera ser llamada Villa de las Águilas. El apellido de Rio de OCA se usa desde los tiempos midernos. ¿Cuándo nace VILLANASUR?. No es posible saberlo con exactitud, pero sí aproximadamente. Si aceptamos como válido un documento del 15 de marzo del año 863, conservado en el mencionado monasterio de San Millán de la Cogolla, VILLANASUR existía ya en ese año. Según leemos en esa fecha, el conde Diego, hijo del primer conde de Castilla, don Rodrigo dona al monasterio de San Felices de Oca una generosa relación de bienes que incluye libros liturgicos ornamentados sagrados, dos cruces (una de plata y otra de latón), bienes materiales como molinos, dehesas, montes, viñas, manzanares, labranzas y algunas iglesias, etc., distribuidos por la Bureba y Montes de Oca. En VILLANASUR entrega la finca e iglesia de San Juan, con todos sus derechos y un molino. Algunos críticos señalan en este documento importantes defectos y lo declaran nulo; el primero, que el conde Diego Rodriguez Porcelos, el fundador de Burgos, no gobernaba en el 863 el condado de Castilla ni Alfonso III el reino de Oviedo. Sin embargo, el hijo del primer conde Rodrigo manifestó durante su mando (870-885) un gran interés por la Bureba y por restaurar en Oca (Villafranca) la antigua Sede episcopal que ejercía en el pueblecito de Valpuesta, tras la destrución de Oca por los árabes. El murió en Cornudilla y fue enterrado en San Felix de Oca. Durante la gobernación de don Diego se repobló la Bureba, se ganaron Poza y Pancorvo para los castellanos y se internaron estos por la Sierra. Para llegar de la Bureba a Oca el camino está en tomar la vía romana que venía de Tarragona y Burdeos y que llegaba a Galicia. Cuando el rio Oca y la vía romana se separan, seguir el rio y entrar inmediatamente en el Valle, dirección recta hacia el Sur, donde se apoyaba el camino en Castil, Alcocero, Cueva Cardiel, Villalmondar, VILLANASUR y Villalómez, con nombres muy significativos todos ellos, que revelan los de quienes dirigieron la repoblación de este tramo del rio Oca: Cardelio, Almondar, Asur y Vela (Beila Gómez=Villalómez). No es ninguna osadía cientifica el afirmar que estos poblamientos se formaron durante la gobernación de don Diego Rodriguez, asesinado en Cornudilla en el año 885. Son pueblos contemporáneos de la ciudad de Burgos, que el mismo Conde pobló y fortificó en el año 884 por voluntad de Alfonso III. Fueron incluidos en el alfoz de Oca, cuya mejor defensa estaba en Alba, cerca de las fuentes de este rio que presta su carácter a la Bureba. VILLANASUR fue fundada por un personaje eminente en aquella primitiva sociedad castellana. El nombre de ASUR tambien preocupa a los filósofos que discuten sus muchas variantes y que en Castilla da juego de Asur, Ansúrez, que intervienen durante el gobierno del conde Fernán González en la alta politica castellana y que llegaran a regentar el condado de Monzón y a fundar la ciudad de Valladolid. Parece que estos primitivos de apellido o de nombre Asur, prosiguen Oca arriba su obra colonizadora, pasan al Alto Arlanzón por Valmala y fundan otra Villa con su nombre: Villasur de Herreros. Hasta el año 1007 no volvemos a encontrarnos en la documentación de San Millán con VILLANASUR. En ese año, día cuatro de enero, doña Godina dona una parte de sus bienes al monasterio de San Felix de Oca y a su abad don Nuño. Entre otros bienes les entrega dos sernas que posee; una, que situa en Villalómez, linda con una tierra de Sarracín Diaz, vecino de la Villa de Don Asur=VILLANASUR. Esta escritura nos confirma que alguna rama de los Asur seguía en este Valle, pues entre los testigos firman don Asur, sacerdote, y otro Asur, cuya condición no se declara. Por este documento conocemos a tres lejanos vecinos de la Villa: Don Sarracín, el sacerdote Asur y, otro pariente, también llamado Asur. Tambien en el monasterio de San Millan se halla otro documento de 1035 en el que Oveco Asur o Asúriz, dona al monasterio de monjas de San Miguel de Pedroso algunos bienes agrarios que posee en las tierras de Pancorvo y Belorado. El correr de los siglos medievales, aquí y alla, nos encontramos con VILLANASUR. Sabemos que en lo eclesiástico dependió de la famosa abadía de Foncea, cuyo centro estaba muy cerca de la Villa de Arlanzón. Dicha abadía se integró luego en el Cabildo de la Catedral de Burgos y allí hay que seguir investigando. En el año 1146, el emperador Alfonso VII otorgó un fuero a la villa de Cerezo y lo hizo extensivo a más de cien villas de las partes norteorientales de Burgos y occidentales de Alava, como Valdegobía, integrada entonces en Castilla. Don Alfonso facilita algunas gestiones judiciales y exime a los afectados por este fuero de algunos pagos, tales los de portazgos, pasajes (de rios) de castellería, de merinos y sayones. Los pueblos se sentían protegidos y aliviados. En el año 1194, el monasterio de San Pedro de Cardeña, cerca de Burgos, puso el pie en VILLANASUR. Al pricipio el monasterio de referencia fue San Felix de Oca; pero el rey García VI de Navarra, el que murió en Atapuerca en 1054, anexionó a San Millán, de la Rioja, el monasterio de San Felix con todos sus bienes. Al acabar el siglo XII, 1194,cinco de mayo, don García Rodriguez y su esposa Godina, con sus hijos Eva, Pedro y García se hacen "familiares" de Cardeña, a cambio de la hacienda que poseen en VILLANASUR y que monta 150 fanegas de "pan mediado", es decir, mitad de trigo y mitad cebada. Por cierto que en el siglo XIV, en 1328, el monasterio burgalés tuvo que hipotecar estas rentas a don Gutierre Ruiz de Hiniestrosa por espacio de diez y seis años, a cambio de cincuenta maravedís que el señor les entregó para cumplir algunos pagos urgentes. Al comenzar la Edad Moderna, VILLANASUR es Villa integrada en la Merindad de Monrtes de Oca, que reune diez y ocho localidades y suma 592 vecinos. En el siglo XVIII se llama Hermandad de Montes de Oca y reune veinte y tres villas de realengo, excepto tres villas, entre ellas, VILLANASUR que es mixta de señorío del marqués de Villagarcía. Precisamente en ese siglo se nos proporciona un conocimieto casi completo de nuestra Villa, merced al Catrasto, ordenado en 1752 por Fernando VI y su ministro, el marqués de La Ensenada. Por las cuidadosas respuestas que realizan los vecinos sabemos que el pueblo se llama VILLANASUR y que es señorio del marqués de Villagarcía; el cual señor marqués nombra a los alcaldes ordinarios de lo Civil y de lo Criminal, al Procurador Síndico y al Alguacil. El pueblo, a través del Concejo, le entrega cuarenta fanegas de pan mediado, diez y ocho gallinas y quinientos maravedís (poco más de catorce reales). El marqués tiene la única casa en ruinas que hay en la villa, lo cual expresa las pocas veces que visitaba al vecindario. El término no es muy grande; tendrá dos leguas de circunferencia. Es de secano, excepto los huertecillos familiares. No tiene monte, salvo un robledal de catorce fanegas. Una fanega de tierra son 3.000 varas castellanas; una hectárea=3,5 fanegas. En el término se cosechan cereales, legumbres, yeros, cáñamo, lino y ajos, que por algo dicen Valle de los Ajos. La ganadería se limita al doméstico, para labranza y ovino del que hay en el pueblo 750 cabezas. Se puede calcular la cosecha de cereal en mil quinientas fanegas. Los precios son un poco más alto que en otras comarcas: La fanega de trigo vale diez y ocho reales y un cordero ocho y un pollo medio real. Los habitantes son apenas doscientos(32 vecinos, 8 viudas y tres habitantes). Viven dedicados a sus labranzas y labores; hay en la Villa dos tejedores, un sastre, un herrero, un aladrero, un campanero y un sacrificado maestro de primeras letras que recibe diez y ocho reales de una fundación pía y 3 1/2 fanegas de trigo que le dan los padres de los alumnos, como también es sacristán, el párroco le añade ocho fanegas de pan mediado. Hay tres jornaleros que en el día que trabajan cobran tres reales. Hay en el Oca dos molinos de una rueda y un pisón que es del Concejo y que usan los vecinos para un trabajo suplementario que es la industria del yeso. No hay taberna, ni mesón, ni tienda. Los vecinos, para que los peregrinos y viajeros no se vean desabastecidos hacen por turno "calle y casa", según costumbre de la comarca. Los servicios son los que pueden ser y los cubre el médico de Villafranca, el cirujano de Villafranca, el boticario y el escribano de la villa principal. El Concejo tiene un presupuesto de 850 reales para caminos y cauces del pisón y molinares, gastos de Hermandad(180 reales), procesiones, fiestas y gastos de viajes, fiel de fechos y saludador de animales. Tiene en contra algunos préstamos al 3% de interés. Pagan al rey Alcabalas y Cientos, que suponen 577 reales. Al final declaran que no hay en la Villa ningún pobre de solemnidad. Así, en el trabajo, la paz y la honradez pasaron los siglos en VILLANASUR. Cada año se repetían las fiestas religiosas, bautizos, bodas y entierros, mercados y ferias en Belorado, Briviesca y Poza de la Sal. Viajar a Burgos era más complicado. El siglo XIX comenzó con mal augurio, con la invasión de España por los franceses y siguió con las guerras civiles, llamadas carlistas y coloniales. Sin embargo, en 12900 la Villa sumaba 311 habitantes. Medio siglo antes, reunía a 207 personas en torno a la parroquial de San Vicente y a la ermita de San Juan Bautista, quizá la primitiva iglesia de la que hablamos antes. Curiosamente, esta ermita no pertenecía a la Iglesia sino al Concejo. La vida era muy parecida a la del siglo XVIII, aunque al maestro de escuela con veinte niños y diez niñas le habían subido el sueldo hasta las veinte y dos fanegas de pan. La segunda mitad del siglo XX rompió formas milenarias de vida con la revolución del campo y la emigración a las ciudades industriales, pero no han conseguido apagar el amor al terruño y a la tradición. VILLANASUR sigue viviendo y este deseo de conocer sus raíces revela sobrevivencia. La Villa según averiguaciones y publicaciones de este Cronista, trajo en el siglo XIX un escudo singular: Un gallo pasante en campo sencillo. La documentación no ofrecía ninguna cromática, por lo cual creemos que se debe mostrar el gallo a su color, copiando de aquellos espléndidos gallos que antaño se veían en los pueblos burgaleses; el campo puede ser de plata o de oro si el ESCUDO lo permite. El gallo solía ser antaño exquisito festero en nuestros pueblos y derivar por ello el simbolismo municipal. Ignoramos porqué razón aceptó tan escueta ARMERIA el Concejo. Tras la presente MEMORIA queda evidente que no se puede olvidar en el ESCUDO DE VILLANASUR su antigüedad histórica y el rio Oca, compañero de la Villa. Diseño del nuevo escudo de la VILLA Partido: Primero en gules, dos espadas de plata en sotuer cargadas con castillo de oro de tres donjones, el central de homenaje, almacenados, mazonados de sable y aclarados de azur, montes de plata y gallo pasante a su color; en punta, onda de plata. Al timbre, corona real cerrada. VILLANASUR expresa así su primitiva castellaneidad aceptado el ESCUDO de Castilla a la que por entero pertenece, aunado con el homenaje debido a Don Asur y a sus gasalianes o compañeros en la obra de la Reconquista y Repoblación, singularmente en esta Villa que, con todo respeto, lleva su nombre. Seguidamente, se refiere a la naturaleza en el segundo campo con la esperanza azur y los Montes de Oca, a cuya Jurisdicción perteneció siempre la Villa. Se recuerda el animal totémico de la Villa, el GALLO cuya fiesta se celebraba con el exigente folclore. La onda es la expresión del río Oca, compañero beneficioso de VILLANASUR. La corona real declara pertenencia al reino de España, nuestra Patria.
Turismo:
HOTEL RURAL CON ENCANTO EN VILLANASUR RIO DE OCA: Desde enero de 2.007 está en funcionamiento en Villanasur un Hotel Rural con encanto perteneciente al club de calidad "Rusticae". El hotel se llama "Valle de Oca" y se encuentra en el principal edificio del pueblo, la antigua casa del médico. Dispone de 9 habitaciones ambientadas en los viajes de Marco Polo y las últimas exploraciones de África. La lujosa y original decoración con suelos de wengué, lavabos de marmol, bañeras de hierro fundido, chimeneas en las suites y multitud de detalles y elementos decorativos, nos trasladan a las épocas coloniales que alimentaron la imaginación y las leyendas de gran parte de Europa hasta bién entrado el siglo XIX.