casi no ven, pero su oido y olfato son excelentes. Tienes estos bichos en jaque a los agricultores de huerta al levantar sus planteles y estropear las plántulas. No lo hacen intencionadamente porque ellos buscan las lombrices que se encuentran bajo tierra, pero el daño es el mismo que si fuese intencionado. Antiguamente habia personas especializadas en la captura de estos animales y se les llamaba toperos, ellos utilizaban cebos y trampas con gran acierto en su captura.
(3 de Febrero de 1952)