Ermita de San Roque, PINILLA DE LOS BARRUECOS

Ermita de San Roque.
Se trata de una construcción sencilla, sin apenas valor arquitectónico pues no presenta ningún estilo definido; no obstante, cuenta con el aprecio y veneración de todos los pinillenses. El día 16 de agosto, festividad de San Roque, las cuadrillas de familias y amigos se reúnen para cenar en sus alrededores. Tras el festín, entonan cánticos populares dedicados al Santo y marchan para la plaza del pueblo donde continúan la fiesta con una animada verbena.

Sus habitantes celebran su fe en una iglesia, dedicada a San Cristóbal, mártir, renacentista, de tres naves y cabecera, con columnas cilíndricas.
El ábside es rectangular con contrafuertes. La portada es renacentista, de arco rebajado, con fustes y dovelas molduradas, pilastrones rematados en pináculos y frontón con hornacina avenerada. La torre es rectangular, rematada en pináculos, con seis huecos (uno ocupado por un contrafuerte
de apoyo), dos campanas y un campanillo.
Hay una original escalera exterior de subida al campanario.
La pila es románica con arcos en relieve y base circular; y el retablo mayor, bueno, es clasicista, quizá de Pablo Cicarte, con relieves.
Sus libros parroquiales comienzan en el año 1586.
En el alto “Zanquiles”, de su territorio, se ha encontrado cerámica Medieval y una tumba de lajas.
En 1896 nace Julián Cámara Fernández, hermano de la Salle, especializado en educación infantil, sobre la que escribe.
En abril de 1938 comienza sus días Tomás Moral Contreras, benedictino en Silos y Leire, organizador de la biblioteca en Silos, investigador, colaborador en revistas, Prior. Escritor, entre otros libros, de uno sobre su pueblo en 1975.
En la actualidad triunfa en la práctica del futbol en Primera División Álvaro Antón, nacido en Burgos como todos los de la provincia ahora, pero residiendo sus padres en Pinilla.