MONTUENGA: Intelectuales e Historiadores...

Intelectuales e Historiadores
perdonad mi atrevimiento
no me mueve ningún interés
situar a este pueblo en su tiempo.

Montuenga tierra de Condes y Nobles,
sus primeros pobladores, castellanos del Norte,
el origen del nombre, consta por sus montes
fue concesión Real, siglo IX-X, por Fernán Glez., Conde.

Gente trabajada, curtida y valiente
reconocido por la nobleza de su época presente,
habilidades, y méritos en distintos avatares,
inteligentes y fogosos con el enemigo en frente.

Instalados ya, en el nuevo condado
y con sangre de auténticos guerreros,
deciden levantar una iglesia con campanario,
en defensa de posibles ataques guerrilleros.

La torre, alta, esbelta y con cuatro frentes,
¿Observar?, ni más ni menos que lo suficiente
para poder divisar, colinas, valles y horizontes
y poder defenderse ante un ataque inminente.

Arcos pre-románicos, por su estructura,
miradores, con sus campanas al viento,
las cuales se escuchan por la ribera del Arlanza
distinguidas, por su sonido y prolongado eco.

Enclave donado y con estatus de independiente,
regido por fueros de valores y costumbres,
ahora, agregado al Ayto. de Madrigalejo del Monte,
administrado por territorialidad y leyes vigentes.

San Antonio de Padua, 13 de junio,
Santa María Magdalena, 22 de julio,
siempre han sido sus santos patrones,
velando por el bien de sus gentes, e intereses.

Hay que visitar y regocijarse en la fuente,
peculiar y debajo de una roca de gran fortaleza,
¿Observar?, dejar rienda suelta a lo que te venga en mente,
después pensar ¡es obra de la naturaleza!

Ver la campiña que la rodea, llana y frondosa,
con su originalidad del pilón y las pozas,
del aire del cierzo, siempre resguardada,
donde bebían los animales y lavaban la ropa las mozas.

Siguiendo las calles y vericuetos del pueblo,
encuentras esas bodegas, bajo tierra perplejo,
encima de ellas, el llamado y significado tercio,
allí culminaba, la procesión y ceremonia del “Encuentro”.

De la época, sólo queda resaltar la escuela,
mixta y de construcción, por debajo, con canal-bóveda-puente,
se metía leña, paja y se encendía y el suelo se calentaba,
hoy no está ¡Qué pena! Alguien que perdió la mente.

Petronio.